El Unicaja acabó con la maldición canaria y se llevó una victoria que Luis Casimiro valoró en la posterior rueda de prensa. "Sabíamos que había que controlar el contraataque del Gran Canaria y estar sólidos en el rebote. Yo creo que hemos conseguido ambas cosas. Hemos tenido el control del partido casi siempre excepto en el tercer cuarto, cuando nos hacen 7 triples y perdemos algo el control del partido. Luego lo hemos retomado y hemos podido llegar al final del partido con una diferencia holgada para ir controlando el tiempo y poder llegar a la victoria", apuntó.

El cambio radical del Unicaja desde que ganara en La Fonteta está siendo un bálsamo para remediar todas las heridas abiertas del inicio de la temporada. Al menos, de momento. Un cambio de chip que no responde a nada en concreto, según el técnico: "La verdad es que no sé en qué ha mejorado. Voy muy al día a día, intentando tomarle el pulso cada día al equipo. Se lo dejo para los que me puedan analizar".

Sobre Guerrero y su buen papel en la cancha del Gran Canaria, en contraposición al poco protagonismo de Gerun, no quiso personalizar: "En pospartidos no respondo a temas individuales, ahora es momento para destacar el trabajo del equipo. No todo el mundo está en forma al mismo tiempo. Tenemos que tener el apoyo y la paciencia suficiente para que todos vayan sumando y vayamos creciendo poco a poco".

El conjunto malagueño ha igualado con este triunfo el balance en Liga Endesa. Tres tropiezos y tres premios. La cosa se va equilibrando a base de mejoras. "Cuando estás en el día a día y no nos iba tan bien como hace un tiempo, hay que centrarse en la mejora diaria. Estar al 50 por ciento en derrotas y victorias es importante, sobre todo por cómo el equipo está respondiendo en momentos de mucha dificultad. Trabamos juntos, estamos juntos y queremos salir adelante. Si hacemos todo esto seguramente las victorias vendrán de manera más regular", sentenció Casimiro.