­Es difícil de imaginar. Pero porque sólo pasa una vez al año y es en Torremolinos. En otros muchos municipios han intentado imitar esta iniciativa de la Asociación de Comerciantes y Empresarios de Torremolinos (ACET), pero ¿a quién no le gustaría levantarse una mañana y sólo tener un reto? Tienes diez horas para gastar 10.000 euros. Esta misión, por catalogarla de alguna manera, es lo que tuvo que realizar ayer Noel González.

La primera parada la hizo en una botica para comprar diversos productos de farmacia y parafarmacia. Allí fue recibido con alfombra roja, globos, flores y cava. Al más puro estilo de un rey. Y es que Noel ayer fue el Rey de Torremolinos por un día.

El ´monarca´ se desplazó por las calles de su pueblo en un Mercedes lujoso con chófer incluido. Noel viajó en todo momento acompañado por su madre y su hermano. A su madre le prometió comprarle una tablet. Junto a ellos viajaba un pequeño autobús con más familiares, miembros de la asociación presidida por Juan Vallejo y representantes del Gimnasio Atlantis, entidad donde Noel entregó el ticket que le hizo ganador del premio.

Noel es camarero y trabaja sólo durante la temporada de verano en el Chiringuito El Velero, por lo que ahora se encuentra en paro. Está reformando su casa, de modo que algunas de sus compras fueron encaminadas a mejorar su vivienda, donde vive con su hija de nueve años.

Después de visitar la farmacia fue directamente a la carnicería Pedro y Emilio. Allí junto a su madre eligió las mejores carnes y comidas preparadas que sirve esta histórica carnicería del torremolinense barrio de El Calvario, del que el premiado es vecino.

A media mañana le tocó al séquito real hacer una parada en la conocida pastelería Dulcipan para reponer las fuerzas gastadas. De ahí ya siguió su camino, casi parando sólo para comer a mediodía, para realizar todas las compras planeadas.

Para su hija se llevó una televisión. Para su padre, un reloj de pared, «es uno de los objetos que mi padre ha querido siempre y quiero aprovechar esta oportunidad para darle el gusto».

No le quedó más remedio que correr para gastar 10.000 euros en sólo diez horas. El premio tenía también como condiciones que no podía gastar más de 500 euros por comercio, teniendo dos compras excepcionales, una de 1.000 euros y otra de 2.000. Al mismo tiempo, tuvo la obligación de realizar al menos un compra en los cuatro sectores de Torremolinos: Bajondillo-Playamar-Los Álamos, Calvario, Centro y La Carihuela-Montemar y El Pinillo con el objetivo de invertir en todas ellas.