Más de 250 emprendedores andaluces arrancaron ayer en Málaga el Encuentro Regional de la Asociación de Jóvenes Emprendedores (AJE Andalucía) bajo el lema «Somos el futuro. Aceptamos el reto» y con el convencimiento de que, a pesar de la crisis, sigue siendo posible cumplir con el sueño de montar una empresa. El foro de emprendedores comenzó con el encuentro de negocios Andatech, que se celebró en la sede de Turismo Andaluz y donde los asistentes pudieron compartir experiencias y entablar sus primeros contactos comerciales.
«El principal inconveniente de los emprendedores es que no tenemos apoyo social, familiar ni administrativo», comentan Lorena González y Ricardo Llamas, los jóvenes responsables de la empresa malagueña Deportae, dedicada a servicios deportivos y animación infantil y que en pocos años ya tiene más 50 trabajadores y da servicio a clubes, superficies comerciales y a medio centenar de colegios. No ha sido fácil aunque admiten que no han tenido problemas en lo que ahora mismo es el principal escollo de un emprendedor: conseguir un crédito.
«Desde el principio hemos tenido el apoyo de los bancos», comentan Lorena y Ricardo, para quien las cosas no están ahora más difíciles aunque sí igual de complicadas. «Es cuestión de actitud. Lo más duro es saber que trabajas, cotizas como autónomo y pagas sueldos, pero si las cosas van mal nadie te va a ayudar, a pesar de que las pymes somos quienes creamos empleo en España», señalan. En cualquier caso, aseguran que no cambiarían por nada la experiencia de ser empresarios y dueños de su propio destino laboral.
Muy curtido también en estas lides está José Antonio Aguilera, el joven emprendedor de Villanueva de Tapia que se hizo famoso hace un par de años con su invento de las almohadillas neumáticas para los pasos y tronos de Semana Santa. José Antonio ya tiene introducida su patente en 160 tronos de 28 provincias españolas y además ha mantenido contactos para venderlas también en Italia y Malta. ¿Qué le diría al que empieza?
«La verdad es que cuesta pero si crees en tus sueños, si la idea es buena, hay que luchar siempre. Poner una empresa no es imposible; lo que es imposible es que un banco te deje dinero», ironizó José Antonio. Él, por su parte, afirma que todo lo que gana lo reinvierte en la propia empresa y prepara el lanzamiento de otras patentes como los badenes inteligentes.
Al encuentro de AJE acuden también los emprendedores más noveles, caso de Ana Rocío García y Alberto López, dos jóvenes periodistas que hace unos meses comenzaron la andadura de la firma Ideanto Arquitectura de la Comunicación para ofrecer un servicio integral que incluye desarrollo y posicionamiento web, gabinete de prensa, redes sociales, reputación online, consultoría y formación.
«Estamos convencidos de que es tiempo de oportunidades. Es verdad que todo está difícil, pero estamos también cansados de escuchar que todo está fatal. Hay que intentarlo, comentan. ¿Lo peor? Según relatan, tener que adelantar el IVA de facturas aún no cobradas, las elevadas cotizaciones sociales y, claro está, la captación de clientes en un momento de crisis.
«Nunca me había planteado ser empresaria pero me he lanzado, y me lo estoy pasando muy bien. Cualquier logro es inmenso; cualquier fracaso es horrible pero es un desafío cada mañana», apuntan.
