¿Cuántas probabilidades hay de que el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, logre aglutinar los apoyos suficientes para formar un Gobierno? Por muy reducidas que éstas sean, ante el hipotético escenario de que Sánchez logre entrar en la Moncloa, el presidente del PP andaluz, Juanma Moreno, aseguró ayer que preferiría la celebración de unas nuevas elecciones. Aunque apostillara después que sólo se trataba de su punto de vista personal, la afirmación del último responsable del PP en Andalucía dejó entrever lo que será, a todas luces, la estrategia de su partido a corto plazo: esperar a que Sánchez fracase en su intención de ser investido como presidente para, a posteriori, colocar de nuevo a su candidato, Mariano Rajoy, en primera línea.
«Es evidente que un Gobierno formado por el PSOE, Podemos e independentistas sería, sin lugar a dudas, una involución desde el punto de vista del progreso económico y social», aseguró Moreno para dejar claro que ante un Gobierno presidido por Sánchez «preferiría ir a unas nuevas elecciones».
Al menos, a día de hoy, Moreno evidencia un respaldo inequívoco hacia Rajoy. Así lo dejó claro ayer para desmentir a posibles voces críticas que habrían surgido dentro del PP ante la supuesta inmovilidad de Rajoy a la hora de estrechar lazos, al menos, con Ciudadanos. «Ahora vamos a ver qué hace Pedro Sánchez y cuál es la aritmética que consigue. Si no logra la mayoría para ser investido, el que tiene que optar a liderar el Gobierno es Mariano Rajoy», manifestó Moreno, defendiendo la legitimidad de Rajoy para lograr la investidura. Por lo que se deduce de las palabras de Moreno, que también habló de que su partido ahora ha pasado a una posición de expectación vigilante, el plan trazado es el de esperar que Sánchez fracase e intentar entonces lograr el apoyo con un Rajoy mejor colocado. Aunque ahora mismo la investidura de Sánchez se asemeje a un hecho semimilagroso, en el PP son conscientes de que el secretario general se encuentra ante una disyuntiva delicada: Moncloa o decir adiós a su cargo como líder del PSOE. Arrinconado y con su futuro en juego, la presidencia del Gobierno podría ser para Sánchez su boya salvavidas particular. En este sentido, Moreno aseguró que «Sánchez se va a dedicar a pactar con quien sea y a cualquier precio con tal de llegar al poder».
No rotundo al PSOE. Por si quedaban dudas, Moreno volvió a resaltar ayer que la postura del PP es la de no a Pedro Sánchez y no al PSOE. No habrá lugar entonces a una hipotética abstención de los populares en aras de una estabilidad deseada. «No vamos a apoyar a ninguna fuerza política que no respete a la lista más votada», sentenció. Moreno acudió ayer a las instalaciones de Aspromanis donde, acompañado por el presidente del PP de Málaga, Elías Bendodo, reivindicó que la Junta abone sus deudas a los Centros Especiales de Empleo.
