El alcalde de Marbella, José Bernal, informó ayer de que la Junta de Andalucía archivará el expediente del deslinde con Benahavís, por el que Marbella cedía 170.000 metros cuadrados a cambio de 30.000, en una zona en la que según varios colectivos, familiares de la exalcaldesa Ángeles Muñoz tenían intereses económicos.
Bernal informó ayer en rueda de prensa de que la orden para sobreseer el proceso la firmó el vicepresidente de la Junta y consejero de la Presidencia y de la Administración Local, Manuel Jiménez Barrios, el pasado 7 de septiembre, y se publicará en los próximos días en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA).
«La Junta ha decidido no continuar con el procedimiento de alterar las lindes en el Horno de la Miera y las urbanizaciones La Quinta, Los Naranjos y Vega del Colorado», apuntó Bernal, quien añadió que con el archivo del proceso se cumple uno de los compromisos del nuevo equipo de gobierno del Ayuntamiento de Marbella.
La orden recoge una sentencia de 9 de febrero de 2015 en la que la Sala del Contencioso Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) destaca la «pérdida del objeto del procedimiento de alteración entre Marbella y Benahavís al anular en su fallo ciertas determinaciones del PGOU» de Marbella, según dijo Bernal.
La Junta ha tenido en cuenta que el gobierno local retirase un recurso que el Ayuntamiento de Marbella presentó en el mandato anterior contra dicha sentencia de la Sala del Contencioso Administrativo del TSJA en Málaga.
La orden de la Junta destaca también el «importante movimiento ciudadano» que se originó en Marbella contra el temor de que la alteración perjudicara los intereses del municipio, explicó Bernal.
Y según el regidor, también ha influido «el acuerdo que la corporación municipal adoptó en pleno el pasado 27 de junio en el que se señalaba el perjuicio para Marbella que conllevaría la modificación de las lindes», dijo Bernal.
Para Carola Herrero, miembro del movimiento ciudadano Ni un metro de Marbella para otra población, las lindes se quedan como en 1873 y el Consistorio tiene que explicar ahora qué va a hacer con esos terrenos, cómo va a planificarlos. «El suelo no puede pasar ahora de no urbanizable a urbanizable porque no lo permite la Ley de Ordenación Urbanística de Andalucía. Vamos a seguir vigilantes a ver qué pasa con lo ya edificado y qué uso se le da a lo no urbanizado».
