La ida y venida de ojeadores de las franquicias de la NBA por el Martín Carpena sigue su curso habitual. Augusto Lima está en su año drafteable y es habitual que al palco del Palacio asistan, especialmente en encuentros de Euroliga, ojeadores de la mejor Liga del mundo. Scouts de Philadelphia, Denver Nuggets y los Bucks Milwaukee vieron el Unicaja-Chalon. El catalán Martí Artigas, de Orlando Magic, presenció el duelo ante el Manresa. Más fácil lo tiene Juanma Rodríguez, consultor para Europa de los Cleveland Cavaliers. Hasta Málaga ha venido esta temporada George Felton, director de ojeadores de San Antonio Spurs...

Lima era el banderín de enganche y en pleno encuentro se han topado, una vez sí y otra también, con Marcus Williams. El base americano es un viejo conocido de la mejor Liga del mundo. Y se le observa con lupa en Málaga, porque no desplegó todo el talento que se le suponía en la NBA. Ahora Williams vuelve a ser motivo de chascarrillo al otro lado del Viejo Continente por el gran nivel que está mostrando en el Unicaja.

Jasmin Repesa dijo, al comienzo del curso, que lo que Williams necesitaba era «un plan serio de trabajo» para recuperarse para el baloncesto. Y el base está cumpliendo con las mejores expectativas. El jugador de Los Ángeles (3 de diciembre de 1985) firmó este verano un contrato por una temporada más otra opcional unilateral del club, con unas cifras realmente bajas: 400.000 dólares por campaña.

Su fichaje ha sido un «pelotazo», ya que el club ha rescatado todo su talento, y Williams ya ha ganado media docena de partidos gracias a su inspiración final. Además, en el contrato que firmó no se estableció ninguna cláusula de escape, ni a la NBA ni a Europa. Por lo tanto, su hipotética marcha, ahora o en junio, necesitará una pormenorizada negociación entre sus pretendientes y el Unicaja.

Al no haber fijada una indemnización, el equipo de Los Guindos tiene la sartén por el mango. Es el Unicaja quien debe fijar, en su caso, una cláusula de salida que el equipo interesado debería abonar. El Unicaja, en cualquier caso, confía en que el base cumpla su contrato en Málaga, aunque es consciente de que en verano, si continúa su rendimiento, deberá revisar su contrato al alza. Pero tanto ahora como en junio desea que Williams siga en el equipo.

Joel Freeland salió a los Portland Trail Blazers por 1,5 millones de euros, y aunque el Unicaja no se ha planteado un hipotético escenario de negociación, nunca querría bajar de una cantidad que Williams ya ha demostrado que vale.

El base acaba de cumplir 27 años y se encuentra en el mejor momento de su carrera, tras su paso por Rusia (Enisey Krasnoyarsk, 2010/11) y por China (Jiangsu Nangang Dragons, 2011/12). Su espectacular etapa universitaria -campeón con Connecticut en el año 2004- llevó a los Nets de New Jersey a escogerle en la primera ronda del draft de 2006. Y en su debut disputó incluso el All Star con los rookies. En su carrera en la NBA ha militado en tres franquicias: Nets, Golden State Warriors y Memphis Grizzlies.

Williams ha vuelto a hallar la felicidad en Málaga, donde ha encontrado el cariño de sus compañeros y la guía de Jasmin Repesa. Su padre viene y va de Estados Unidos a Málaga para estar con él, como ha hecho esta Navidad. Y Williams, que es consciente de que debe ser más regular, tratar de dirigir al equipo cuando esté en pista y defender con mayor agresividad, lo agradece.