Zoran Dragic sabe que el gran defecto de su juego es el tiro a canasta. El internacional esloveno es un magnífico defensor, muy rápido para finalizar los contraataques y un gran penetrador, pero le cuesta anotar desde posiciones exteriores. Por eso, desde hace un par de meses, todavía con Jasmin Repesa al frente del banquillo verde, inició un trabajo específico de tecnificación del tiro que en estas últimas semanas, ya con el equipo eliminado de la Liga Endesa, se ha intensificado.

Así, Zoran Dragic acude cada mañana al Martín Carpena, junto a Paco Alonso, técnico del club, para perfeccionar y mejorar el tiro a canasta, su asignatura pendiente. De lunes a sábado, entre 90 minutos y dos horas, Dragic trabaja para ser mejor jugador y para que su rol de «especialista» defensivo deje paso la próxima temporada al de «jugador completo».

El club contrató el verano pasado a Dragic procedente del KRKA Novo Mesto de su país. Se hizo una apuesta fuerte por él, con un contrato por cuatro temporadas (2+2). En el club están satisfechos de la aportación de Zoran en la campaña recién terminada y confían que sus prestaciones incluso mejorarán en su segundo año en Málaga.

Dicen los que le ven estos días entrenar que se nota ya una cierta mejoría. Que la progresión es evidente y que incluso la pasada semana, su hermano Goran, que acudió al Carpena a verle un rato de una sesión de tiro, le espetó: «Estás tirando mejor que nunca».

Lo cierto es que los técnicos del club, con Alonso a la cabeza, le han dado una serie de pautas de cómo agarrar el balón y mejorar la denominada «línea de tiro», tanto para estático, como tras pase y tras bote. Sus entrenamientos son grabados en vídeo para luego ver en imágenes las cosas que ha hecho mal e intentar corregirlas. El objetivo, en definitiva, es sentar unas bases técnicas estables que le sirvan para mejorar sus lanzamientos.

Aunque el trabajo es a largo plazo, sus porcentajes han mejorado. Esta misma semana anotó en una sesión una serie de 46 tiros libres consecutivos, algo que nunca antes había firmado.

A Dragic se le ve contento y animado, convencido de que su trabajo de estos días de mayo y junio servirá para que la próxima temporada sea un jugador más determinante en el juego de ataque cajista.

El próximo sábado, Dragic dará por concluido este trabajo de postemporada en Málaga. Se tomará una semana de vacaciones y después empezará a preparar ya el Eurobásket de su país. Bozidar Maljkovic, actual seleccionador esloveno, cuenta con él para la cita continental que el combinado de los hermanos Dragic jugará ante su afición.