El Unicaja afronta su "semana fantástica". Partidazo en la Sala Pionir de Belgrado y el domingo, visita al Real Madrid, con la Copa del Rey en juego. "Llegamos al final de una de las etapas, acabando la primera ronda de la ACB y es evidente que va a ser un examen y llegamos con la sensación de que como equipo vamos claramente hacia arriba, lejos del potencial real, pero hacia arriba, pero hay cosas que nos pueden lastrar e impedirnos el objetivo de la Copa. Es un fin de semana clave, dos partidos de gran nivel. Pero de los últimos días cambiaría poco. Nos podemos echar en cara algunos partidos que se perdieron, pero ahora estamos siguiendo la línea que signemos. Y dependiendo de lo que suceda el domingo podemos admitir que nos hemos equivocado", dijo.

Aunque el viernes ya hay partido es imposible no mirar al domingo, con la Copa del Rey en juego. "Es difícil abstraerse. Los jugadores han de estar preparados para todo. Hay muchos factores anímicos y psicológicos, no sólo técnicos o tácticos, y hay jugadores que, no de forma premeditada, valoran más una competición que otra. Tú te peleas, pero las personas somos así. No hay excusas, no podemos reservarnos para el domingo. El otro día hicimos una secuencia de los partidos que nos vienen en las próximas semanas y nos planteamos cuáles son los más importantes. Ya lo decía Herrera y ahora el Cholo, no hay más que el partido a partido. Después vendrán tres partidos seguidos en casa, Efes y Lokomovit en Euroliga, y entre uno y otro, Sevilla".

El viernes se abre la veda. Partidazo ante el Estrella Roja en la Sala Pionir, un ambiente impresionante, único, en el que el Unicaja desea pescar en el Top 16. "Sabemos que Estrella Roja es un equipo potente. Le han ganado al Madrid y al Khimki, el otro día al Panathinaikos. Han tenido a un montón de jugadores, han hecho cambios, tiene mucho talento en las manos, con jugadores futuribles para la NBA y grandes equipos, con grandes talentos serbios en el tiro. Intentaremos ser estables y vamos a una pista importante, donde hay que demostrar carácter y personalidad. Ahora no hay más vida que el viernes, y luego al domingo intentaremos reciclarnos y llegar lo mejor posible a Madrid. Ahora debemos ser competitivos, ser serios detrás", explicó el técnico.

A pesar de todo, el entrenador está satisfecho por estar envuelto en las dos competiciones más complicadas de Europa. "Mucha gente quisiera estar en nuestra piel, con doble competición, este nivel de tensión. Lo sobrellevamos más o menos bien. Esperemos ir dejando los bucles negativos atrás. Que eso quede en la retina de lo que no queremos repetir. Cuando juegas con Estrella Roja o Real Madrid debes irte mirándote al espejo y sabiendo que has hecho el cien por cien. Yo creo en ese nivel de competitividad y autoexigencia, porque eso se contagia. Vamos a hacer un buen planteamiento del partido. Hemos afianzado cosas y ver qué nivel de experiencia. Algunos jugadores no han jugado nunca en Belgrado, y hay que centrarse en lo que depende de ti. Somos cinco contra cinco, no cinco contra 10.000", dijo.

Esta semana, el entrenador ha encerrado a sus jugadores y les ha puesto ante sí una lista con la próxima serie de partidos que al Unicaja se le viene encima. La conclusión fue que Plaza tuvo que marcar "en rojo todos los partidos". "Y ahora vamos al Pionir, una cancha muy dura y muy importante. Vienen de ganar al Panathianikos y vamos a una cancha muy dura. Ellos se encuentran muy cómodos, suben su aportación ofensiva. Es un equipo muy duro allí y aupado por una presión de la grada allí".

El Pionir te obliga a cambiar el registro habitual. No valen las jugadas cantadas, porque el ambiente ensordecedor te impide escuchar al compañero, como hoy ha contado DeMarcus Nelson en declaraciones a este periódico. "Mi experiencia es buena. He ganado y recibido de todo allí. He ido en épocas difíciles, con ayudantes que no eran del país. Cuando vas con el Real Madrid, que es un rival importante, la pista está muy caliente. Ayer les dije que hay presión, que no nos oímos, que las señales acústicas pierden poder, pero al final, la mentalidad es que somos cinco contra cinco. Hemos de aumentar la comunicación, hay que hablar en los tiros libres, maximizar la comunicación en esa pista. Es una pista caliente, pero el público es respetuoso".