«El Quijote», como testigo del pasado cervantino de Vélez

El casco histórico de la ciudad que vio nacer a la pensadora María Zambrano mantiene una escultura de Cervantes, así como un inmueble público que dio aposento al escritor

Estatua del escritor en el casco histórico veleño.

Estatua del escritor en el casco histórico veleño. / EFE

Fran Extremera

Fran Extremera

Don Quijote de la Mancha es la obra más importante de la literatura española, así como una de las más significativas de toda la historia universal. De hecho, fue la que dio paso a la edad moderna e incluyó todos los géneros en un ejercicio único en el desarrollo de una novela. Pues en sus páginas hay una referencia explícita a Vélez Málaga, ciudad en la que Miguel de Cervantes Saavedra residió poco antes de empezar a darle forma a tan magna obra.

El Ayuntamiento impulsará desde enero nuevas visitas teatralizadas. | EFE

El Ayuntamiento impulsará desde enero nuevas visitas teatralizadas. | EFE / FRAN EXTREMERA. VÉLEZ-MÁLAGA

Aunque la capital axárquica está cargada de referencias al escritor nacido en Alcalá de Henares, este próximo 2024 reforzará la impronta de Cervantes con diversas acciones promocionales diseñadas por el Ayuntamiento veleño y que incluyen la participación de algunos de los agentes culturales más importantes de la capital de la comarca de la Axarquía.

Así arrancará enero con visitas teatralizadas, programadas para los sábados, en las que un actor dará vida al propio autor de «El Quijote». Cervantes posee una estatua junto al Palacio del Marqués de Beniel, enclavado en pleno casco histórico y considerado como el principal edificio civil de la ciudad que por otra parte vio nacer a la pensadora María Zambrano.

El inmortal escritor también da nombre a la Casa Cervantes, que le dio aposento durante su estancia como recaudador real en el municipio que actualmente posee una población de más de 80.000 habitantes. Por cierto, esa tarea como funcionario público a finales del siglo XVI también la desarrolló en Álora, en pleno Valle del Guadalhorce, y en otros muchos enclaves andaluces.

No es de extrañar que para algunos estudiosos pudiera a haberse empezado a idear «El Quijote» en el propio término veleño. Esa referencia explícita que quedaría plasmada en la novela justifica tal afirmación: «¡Gracias sean dadas a Dios, señores, que a tan buena parte nos ha conducido!, porque, si yo no me engaño, la tierra que pisamos es la de Vélez Málaga, si ya los años de mi cautiverio no me han quitado de la memoria el acordarme que vos, señor, que nos preguntáis quién somos, sois Pedro de Bustamante, tío mío», figura en uno de los volúmenes de la principal obra cervantina.

El inmortal Miguel de Cervantes Saavedra. | L. O.

El inmortal Miguel de Cervantes Saavedra. / L. O.

Relación con Vélez Málaga

La tradición señala que Cervantes pudo haber desembarcado en el núcleo veleño de Mezquitilla, muy cerca de la localidad de Lagos, del núcleo torroxeño de El Morche o del también vecino municipio de Algarrobo. De hecho, en dicho enclave del litoral permanece como recuerdo una escultura en piedra.

Los responsables municipales explican que incluso hubo un equipo de fútbol, ya desaparecido, con el nombre del propio Cervantes. Y también expresan que el escritor puedo haber sido enjuiciado, hasta dar con sus huesos en la cárcel sevillana donde dio forma a la novela, por haberse apropiado en Vélez-Málaga de un total de 141.000 maravedíes.

La Casa Cervantes del casco histórico veleño, por la repercusión histórica del autor, no es la única que existe en España. Encontramos al menos otras seis en su ciudad natal, Alcalá de Henares, Madrid, Valladolid, la localidad toledana de Esquivias, Alcázar de San Juan y en Cartagena.

El escritor y gestor cultural Salvador Gutiérrez, que en este momento forma parte del organigrama de la Concejalía de Cultura, pone en duda que realmente Cervantes pudiera «meter la mano» en las cuentas reales para las que actuaba como recaudador. El caso es que tras recorrer las provincias de Almería y Granada se hospedó en Vélez-Málaga, allá por 1594, al menos dos veces. En enero, justo 430 años después, el turista podrá «reencontrase» con él, según asegura el alcalde, Jesús Lupiáñez.