Un cartel, una polémica. Así ocurre siempre en Málaga. Y el Festival de Málaga no ha sido ajeno a ello: ¿recuerdan cuando el cartel que se le encargó a David Delfín resultó sospechosamente parecido al que confeccionó para el Festival de Benicàssim? Ha vuelto a ocurrir con Javier Calleja. El motivo empleado por el artista para anunciar la vigésima edición del certamen de cine malagueño es prácticamente idéntico a su pieza 'No art here' -sustituye el mensaje con el número 20-, que pudo verse el año pasado en diversas galerías. ¿Autoplagio?

El Festival de Málaga quiso encargar el 'look' de una edición de número redondo como la 20 a un artista local con prestigio y solvencia en lugar de convocar un concurso abierto como en anteriores ediciones. El propio director del certamen, Juan Antonio Vigar, propuso a Calleja, argumentando, en un reciente consejo de administración de la Sociedad que rige el Festival, "que tiene un currículum, muy importante que le lleva a ser uno de nuestros artistas más internacionales". "Aunque su cotización está muy por encima de las cifras que nosotros manejamos -3.000 euros al ganador del concurso del cartel-, su idea es apoyar un evento que considera muy importante para su ciudad, por lo que estaría dispuesto a llegar a un acuerdo, siempre con el límite de esa cantidad".