El malagueño Borja Vivas, tres veces campeón de España de lanzamiento de peso en pista cubierta, renuncia ya a sus modestos objetivos de "coger experiencia" en campeonatos internacionales y en París se propone ya "ganar plaza de finalista, entre los ocho primeros".

"Ya no me vale con lo de coger experiencia, sino que intentaré meterme en la final. Ya estuve en la de los Europeos al aire libre de Barcelona, pero éramos doce y no conseguí estrictamente puesto de finalista", recordó Vivas.

A sus 26 años, ya se ha consolidado como número uno español, aprovechando las lesiones y el consiguiente declive físico de Manuel Martínez. Ahora, Borja Vivas pretende afirmarse en marcas cercanas a los 20,5 metros, "porque con ellas se está en las finales".

Para ello tendrá que mejorar su trabajo de piernas. "Reconozco que mi técnica de piernas es defectuosa, pero se puede subsanar antes del verano. Es el primer año que entreno mañana y tarde y espero que eso me ayude a estabilizarme por encima de los 20 metros, para que esos lanzamientos no sean flor de un día".

Vivas disputará la ronda de calificación de peso este viernes a las 9.30 horas y, si la supera, regresará por la tarde al círculo para competir en la final desde las 17.30.