La información también se globaliza. Las nuevas tecnologías permiten que las noticias lleguen a cualquier parte del mundo, independientemente de dónde se produzcan. La segunda jornada del curso ´Desafíos de la información audiovisual en el nuevo siglo´ contó ayer con la presencia de varios expertos en comunicación, entre ellos, el director general editorial de La Opinión de Málaga, Joaquín Marín, que analizaron cómo afecta la aldea global preconizada por McLuhan al modo de contar las informaciones.

En el debate también intervinieron Antonio San José, de CNN+, y Pablo Carrasco, ex director de contenidos de Canal Sur y TVE y actual director general del grupo ZZJ. San José señaló que "cualquier noticia tiene una influencia directa en cada uno de los ciudadanos que habitamos este planeta". La situación actual, según este profesional, "plantea una serie de retos y desafíos profesionales que hasta ahora no teníamos que controlar los periodistas, con lo que vamos a tener que hablar también del periodista global", explicó.

Para San José, la red dentro de este nuevo escenario tiene un papel básico y esencial; además es un instrumento no sólo interesante sino imprescindible para el periodista; pero argumenta que habría que distinguir, refiriéndose a los bloggers, "entre los contenidos con garantías y sometidos a los estándares del periodismo, comprobación de fuentes, etcétera y aquello que es pura basura, porque hay mucha basura circulando por la red y eso me preocupa".

Empresas periodísticas. Por su parte, Joaquín Marín, con relación a las nuevas tecnologías y su incidencia en los medios de comunicación, señaló, desde su amplia experiencia, que en la actualidad el 10% de la población lee los periódicos por internet. Respecto a la comentada crisis de los medios escritos en favor de los digitales, aseguró que el periódico impreso no va a desaparecer, sino que irá destinado a una minoría.

Marín señaló que, en ocasiones, los culpables de que los periódicos impresos estén en peligro son las propias empresas y los propios periodistas, ya que "apostamos por la cantidad, hacemos periódicos infumables con muchos suplementos y no se apuesta apenas por la calidad". De hecho, Marín señaló que le gustaría crear un periódico impreso de no más de 24 páginas y con unas noticias muy preparadas y con poca publicidad. "Serían periódicos legibles e interesantes y tendríamos a nuestros periodistas mejor pagados. Me gustaría lograr que el periódico fuera rentable por sí mismo, sin necesidad de depender tanto de la publicidad", dijo.

Entretenimiento. Por último, Pablo Carrasco opinó que la clave de ser un buen generador de contenidos está en tener claros sus tres puntos básicos: la accesibilidad, el contacto y la permanencia. Afirmó que, para él, el entretenimiento en televisión ha muerto. Dijo que la fórmula del éxito no existe y el público es la clave del asunto. Para él el mayor error de los generadores de contenidos es crear contenidos a su gusto e influencia personal y no al gusto del público, su principal objetivo. Como conclusión, Carrasco aseguró que no hay tendencias ni fórmulas magistrales. Hay que inventar "universos" entendibles y coherentes que permitan generar muchos minutos coherentes y entendibles.