"A pesar de que lo estamos pasando mal, vamos a salir del agujero"

Ha sido especialmente criticado el recorte en un programa social que se denomina Plan Concertado y que es el que cubre las ayudas de emergencia o básicas para las personas que necesitan una ayuda concreta para pagar el recibo de la luz, el alquiler, comida o ropa, ¿no se ha podido evitar este tijeretazo?

El Plan Concertado cuenta con la financiación de tres administraciones, el Estado, las comunidades autónomas y las administraciones locales, y son éstas últimas las que financian el 55% de este plan, las regiones más del 30% y el Estado el 9%. Por tanto no estamos hablando de una aportación decisiva por parte del Estado. Además, ahora con la crisis muchas regiones y ayuntamientos no podían poner su parte. Es difícil sacar un Plan Concertado cuando ya hay partes que te dicen que no van a poder poner el dinero. Es verdad que se ha hecho un ajuste y que ahora la aportación del Estado pasa al 5%, y disminuye la cuantía, pero el montante no es decisivo. Las competencias exclusivas en materia asistencial y social es de las comunidades autónomas y el papel del Estado es reequilibrador. El Estado está facilitando otras medidas de tesorería a las comunidades para que tengan más recursos.

¿Estás reformas serán suficientes?, ¿qué nos espera en el futuro?

Espero que sean suficientes. La reforma está pensada a largo plazo y la intención es que no haya que modificarla, pero todo va a depender de cómo marche el modelo.

¿Hay algo positivo? ¿qué mensaje trasladaría a la población?

Esto no es fácil. Yo pido paciencia a los ciudadanos y que tengan confianza en las medidas que se han tomado que son necesarias para salir del agujero que nos hemos encontrado. Estamos convencidos de que a pesar de que lo estamos pasando mal todos en un plazo de tiempo medio, en un año, empezaremos a tener progresivamente mejorías económicas y del desarrollo, crecer, crear empleo...e iniciar un ciclo expansivo y siempre con la cabeza en que no vuelva a pasar. Vamos a salir de ésta, sin lugar a dudas, a pesar de que lo estamos pasando mal.