­Un total de 250 familias de los cinco continentes, entre ellas dos malagueñas, fueron enviadas ayer por el papa Francisco como evangelizadores por el mundo durante el transcurso de una audiencia celebrada en el Aula Pablo VI del Vaticano. Francisco Salido y Julia Peral, que pertenecen a la parroquia de La Purísima y tienen siete hijos, partirán próximamente a la ciudad de Abiyán (Costa de Marfil) mientras que Jesus Navarro y Esperanza Torreño, de la parroquia de Nuestra Señora de Fátima y con cuatro niñas (ella está además embarazada del quinto hijo), se irán a Biarritz, ciudad del sur de Francia.

Ambas familias, integrantes del Camino Neocatecumenal, comentaban ayer desde Roma que dan este paso en «agradecimiento» a todo lo que Dios ha hecho en sus vidas y como «un servicio a la Iglesia», que quiere evangelizar por los cinco continentes a través, precisamente, de las familias.

«Estamos a su disposición. Sabemos todo lo que supone y siempre puede haber miedos y nervios pero confiamos en que el Señor va por delante y nos ayudará. Vamos a vivir de una forma normal, mostrando a la sociedad la belleza de la familia cristiana», afirmaba ayer a este periódico Jesús Navarro, de 44 años y que trabaja como diseñador gráfico. Su esposa, Esperanza, tiene 35 y es profesora de música.

Por su parte, Francisco Salido, de 36 años y enfermero, mostraba también a Diócesis Málaga su satisfacción por la misión que van a emprender. «Estamos muy contentos de que el Señor nos haya elegido, que se fije en nosotros y se fíe de nosotros. Pero siempre con la vista puesta en que el Espíritu va por delante en esta misión y que es el Señor quien lleva el camino y quien nos guía», explicó.

En el Aula Pablo VI estuvieron presentes, además de las 250 familias, unos 8.000 miembros del Camino, la mayoría de ellos catequistas responsables en los cinco continentes; sacerdotes; seminaristas de los seminarios diocesanos misioneros Redemptoris Mater de Europa y los responsables de diversas comunidades.

Estas familias enviadas para evangelizar han recibido el destino esta misma semana en el trascurso de una convivencia internacional en Italia, donde también se han formado cada una de las nuevas missio ad gentes, que se constituyen a petición de los obispos de las diócesis a las que son destinadas estas familias.