Apoyar a los jóvenes malagueños es un tema importante en la Junta de Andalucía, que ha destinado al sector agroalimentario en torno a 100 millones de euros provenientes de diferentes convocatorias europeas, de los cuales, le corresponden a Málaga más de cuatro. Esta dotación está enmarcada dentro del programa de desarrollo rural en el marco económico de la Unión Europea 2014-2020 del Fondo Europeo Agrícola para el Desarrollo Rural (FEADER).

A nivel provincial, en Málaga han presentado 129 solicitudes, de las cuales se han aprobado con carácter definitivo 63 y recibe una partida presupuestaria de cuatro millones y medio de euros, lo que supone un aumento de un millón de euros la dotación de las convocatorias de 2015 y 2016.

Una de las actuaciones de la Consejería en materia de apoyo al sector ha sido la de incrementar en 45 millones la dotación de la convocatoria de 2018, que ha pasado de disponer de 35 millones a 75, que van destinadas a 1.350 jóvenes agricultores andaluces. Se trata de una forma de "apoyar a los jóvenes andaluces", según ha explicado el delegado de Agricultura y Ganadería, Fernando Fernández Tapia-Ruano.

Una de las novedades que presenta esta nueva convocatoria es el pago del 25% de las ayudas en el momento de la aprobación de la solicitud. Hasta ahora, tras la resolución favorable de los trámites, los participantes debían esperar un año aproximadamente para recibir la cuantía.

A ello se une la reducción de las trabas burocráticas. "Queremos facilitarles la presentación de documentación. Disminuir la burocracia, esa maraña de documentación para facilitarles la presentación se solicitudes y favorecer la resolución", sentenció el delegado.

Se trata, según el delegado, de "garantizar el relevo generacional del campo y garantizar y potenciar la creación de empleo y el desarrollo económico rurales evitando la despoblación y favoreciendo la fijación de la población al territorio". Ha destacado que en la convocatoria 2015-16, ya finalizada, se han pagado 28 millones de euros para estos jóvenes agricultores, "que es donde debe estar el dinero".

Estas medidas de unen a otras acciones gestionadas de forma paralela como la ayuda a la organización de los certámenes agroganaderos con una dotación de un millón de euros, para la transferencia de conocimiento e información al sector o la puesta en marcha de préstamos de hasta 300 millones de euros a interés 0 para paliar las posibles consecuencias de los aranceles o la sequía. "Es una buena medida que pone de manifiesto el interés, la preocupación y la disposición de la Consejería hacia el sector", sentenció el delegado.