La Rosaleda marca el camino

El Málaga CF se encomienda una vez más a La Rosaleda, aunque esta vez será diferente y el ambiente no podrá ser el de las grandes citas en Martiricos. En esta ocasión, los blanquiazules no contarán con el apoyo de su gente en dos encuentros tan trascendentales como los que afrontará en los próximos cuatro días, pero el empuje, las ganas y la ambición deberá ser la misma que si tuvieran esas 30.000 almas alentando desde las gradas.

Los de Sergio Pellicer se juegan la permanencia en estos dos próximos encuentros en La Rosaleda ante dos rivales directos. Mañana domingo recibirán al Albacete y solo tres días más tarde será el Deportivo el que visite el feudo blanquiazul. Estos partidos tendrán la misma o más importancia para el futuro de la entidad que el vivido precisamente hace poco más de un año ante los coruñeses en el play off de ascenso a Primera, aunque ahora el objetivo sea totalmente diferente.

De salir airosos de esos dos encuentros -o sumar al menos cuatro puntos- la salvación estaría prácticamente garantizada. En caso contrario, el conjunto blanquiazul viviría unas últimas jornadas de infarto para alcanzar la meta de mantenerse otro año en LaLiga SmartBank.

La igualdad en la parte baja de la tabla es máxima. El Málaga dio otro pequeño paso adelante tras lograr el jueves un valioso empate en Vallecas, pese a las múltiples bajas. El punto logrado frente a los de Paco Jémez cobró aún más valor debido a los resultados de los equipos que también luchan por la permanencia, que dejaron a los malagueños con cuatro puntos de ventaja sobre los puestos de descenso a falta de cinco jornadas por disputar.

Y dos de esos clubes que luchan mano a mano por evitar caer al infierno de la división de bronce son precisamente al Albacete y el Deportivo de la Coruña, los dos próximos rivales de los de Sergio Pellicer. En estos momentos, el Málaga es 15º con 45 puntos, igualado precisamente con los gallegos, que son decimosextos, y con un punto de ventaja sobre el cuadro manchego, 18º con 44. Por detrás ya, en la zona roja, quedan el Numancia, 19º con 41 puntos; el Lugo, 20º también con 41; el Extremadura, 21º con 37 y el desahuciado Racing de Santander, colista con 30 puntos.

Partidos de siete puntos

Cada partido de estos dos que saque adelante el cuadro blanquiazul tendrá premio doble: los tres puntos que subirán a su casillero y los tres que dejarán de sumar equipos inmersos en su misma batalla. Y además entrará en juego ganar el average particular, decisivo en caso de empate a puntos con cualquiera de estos conjuntos.

En la primera vuelta, los malagueños ganaron por 0-2 en Riazor, por lo que una victoria o un empate -incluso una derrota por un gol- le haría ganar el duelo particular frente a los de Fernando Vázquez. En cambio, cayeron por 1-0 en su visita al Carlos Belmonte de Albacete, por lo que es de obligado cumplimiento la victoria para, aparte de sumar los tres puntos, igualar el average particular o llevárselo si son capaces de vencer por más de un tanto. En el hipotético caso de que quede igualado, el Málaga saldría beneficiado ya que cuenta con un balance general de goles mucho mejor que el de los manchegos: 31 goles a favor y contra (+0) para los blanquiazules y 30 anotados y 42 encajados (-12) para los de Luis Miguel Ramis.

En definitiva, el Málaga se juega la temporada en su estadio en un plazo de cuatro días. La tranquilidad de lograr el objetivo de la permanencia casi de forma matemática a falta de tres jornadas para el cierre de la Fase Regular o verte envuelto en un buen lío depende de los resultados que se cosechen en estos dos enfrentamientos directos. Y ya se sabe, «no deje para mañana lo que pueda hacer hoy».