Afición

La marea blanquiazul invade Granada

Fiesta completa de la afición del Málaga CF antes, durante y después del partido en el Nuevo Los Cármenes

Más de 5.000 aficionados del Málaga CF llenaron la grada de preferencia del estadio Nuevo Los Cármenes de Granada.

Más de 5.000 aficionados del Málaga CF llenaron la grada de preferencia del estadio Nuevo Los Cármenes de Granada. / Agencia LOF

Manuel García

Manuel García

Día histórico para la afición del Málaga CF en Granada... y con final feliz. Unos 5.000 seguidores blanquiazules cogieron la carretera para presenciar una jornada que se recordará por mucho tiempo. Sí, 5.000 hinchas -o quizás más- que se dieron cita en el Nuevo Los Cármenes para ver ganar a su equipo un partido de Primera Federación.

La marea blanquiazul invade Granada

La marea blanquiazul invade Granada / manuel garcía. granada

La hinchada blanquiazul lo volvió a hacer. Inundó por completo los aledaños del estadio disfrutando de una gran previa en la ciudad nazarí antes de completar su fiesta particular en la grada de preferencia del Nuevo Los Cármenes.

La marea blanquiazul invade Granada

La marea blanquiazul invade Granada / manuel garcía. granada

La jornada se desarrolló con total normalidad, en un ambiente festivo con aficiones entremezcladas sin ningún tipo de altercado, como debe ser. En los alrededores del estadio se instaló una gran barra para comer, beber y coger fuerzas antes del encuentro frente al filial rojiblanco. Las imágenes hablan por sí solas en una nueva lección de malaguismo.

La marea blanquiazul invade Granada

La marea blanquiazul invade Granada / manuel garcía. granada

Locura dentro del estadio

Conforme iban entrando los aficionados blanquiazules al estadio la imagen se iba haciendo más impactante. La parroquia malaguista llenó por completo la grada de preferencia del estadio desde minutos antes del choque. No pararon de saltar y animar desde el calentamiento.

Las mayores explosiones de júbilo llegaron con los tantos de Dioni y Roberto. Y el colofón llegó con la celebración del triunfo tras el pitido final. Equipo y afición fundidos en uno, botando y disfrutando de un nuevo triunfo a domicilio. La estampa quedará para el recuerdo, sin duda.

Más allá de los tres puntos, lo importante fue una nueva demostración de que esta afición, y este club, están muy vivos y van a seguir peleando por empujar a los jugadores a terminar la temporada con el objetivo deseado por todos: la vuelta al fútbol profesional.