Ha pasado medio siglo desde que la familia Puya dejara Ronda para instalarse en Marbella. Luis Puya y su esposa, Ángeles García, adquirieron una parcela para construir unos almacenes con los que expandir por la Costa del Sol el negocio familiar que Rafael Puya fundó a finales del siglo XIX.

Los locales se edificaron en Huerta de los Cristales, cerca de la zona que, popularmente, se conoce como Puya, lo que evidencia la relevancia que ha logrado la firma en el municipio.

«Cuando todo esto empezó, yo era un niño. Estos 50 años han pasado demasiado rápido y puede llegar mucho más lejos», señala Paco Puya, hijo de Luis, bisnieto de Rafael y presidente de Saneamientos y Cocinas Puya que a finales de noviembre recogerá el Premio Empresario que este año le concede la asociación de empresarios Centro de Iniciativas Turísticas de Marbella (CIT) como reconocimiento a la trayectoria de la firma.

La primera tienda de Puya propiamente especializada en saneamientos, sobre todo en fontanería, se abrió en San Pedro, en un local de pequeñas dimensiones que Luis Puya alquiló cerca de la actual calle Córdoba. La familia se instaló en San Pedro porque, entonces, «estaba en el centro de una zona en la que se estaba produciendo uno de los desarrollos más importantes», recuerda Paco. Eran los años en los que Nueva Andalucía o Puerto Banús iban cogiendo forma o de la construcción del pantano de La Concepción, en Istán.

El «primer salto» de la empresa se produjo a la calle Castilla, aún en San Pedro. «El local en el que estábamos era muy pequeño. Todo tenía que ser por encargo. No teníamos dónde descargar la mercancía. Nos veíamos obligados a cortar la calle y pedir ayuda a los vecinos para descargarla», señala el presidente de la empresa de saneamientos y cocinas.

Paco iba al instituto a Marbella. De esos años recuerda la «gincana» para coger el autobús y recorrer la distancia entre ambos núcleos de población. «No peleábamos con los albañiles para poder entrar en el autobús y estar en el instituto a las 8.00 de la mañana», agrega.

De sus años de estudiante, recuerda también que, cuando hacía falta personal en la tienda, un vecino acudía al colegio para llamarle.

«Decía ‘vengo a por Paquito Puya, que hace falta’ y yo salía corriendo para echar una mano en la tienda. Si había tiempo volvía al colegio. Así aguanté un par de años», apuntó.

Tras el bachillerato, dejó los estudios y se centró en la empresa. «No había posibilidad de estudiar ninguna carrera. No me costó ningún trabajo empezar en la empresa porque lo llevaba en la sangre. Desde niño, me encantaba atender a los clientes», apunta.

El primer empleado externo fue Manuel Caracuel, al que la familia encargó abrir la tienda en Ronda, donde contrajo matrimonio. «Fue, para nosotros, una persona muy importante», agrega. La empresa cuenta ahora con más de 70 empleados repartidos entre los establecimientos de Marbella, San Pedro y Ronda y el centro logístico, ubicado en El Gamonal, en San Pedro. «Hay que tener personal muy bien preparado porque el cliente también viene muy bien preparado», destaca.

La tienda de Marbella ofrece productos de alto nivel, especialmente en baños y cocinas y es la que «nos hace estar en los mejores proyectos y casas de la zona y trabajar con arquitectos y promotores de primera línea», destaca Paco.

Según el presidente de la empresa, «en Marbella se han hecho casas de primera categoría toda la vida, pero las casas de Guadalmina Baja de hace 40 años ya estaban ahí y muchas siguen siendo de las mejores». «Muchos clientes han llegado 30 años después a nuestras tiendas y han expresado su pena por tener que quitar los primeros grifos que les pusimos. Nosotros les contestamos ‘es que lo grifos duran demasiado; tendrían que durar menos’», señala.

Para celebrar el medio siglo de vida, Puya ha emprendido diferentes acciones de patrocinio deportivo y solidarias, como donaciones a oenegés del municipio, para rememorar la efemérides. «Llevar a cabo estas acciones sociales forma parte de la propia filosofía de empresa y supone una satisfacción poder colaborar con entidades de este tipo cuya labor repercute en la localidad de Marbella y San Pedro», concluye.