El Ayuntamiento de Marbella, a través de la Delegación de Parques y Jardines, ha comenzado la segunda fase del Plan de Poda municipal, que prevé actuar este año sobre más 3.800 palmeras y cerca de 2.350 árboles.
Los trabajos se desarrollarán hasta septiembre y su objetivo es conservar y mantener la masa arbórea urbana de Marbella para hacer frente al cambio climático y la preservación de la biodiversidad, según el Ayuntamiento.
La primera fase del plan de poda comenzó a principios de año y sirvió para actuar sobre 160 árboles y más de 1.500 palmeras, mientras que la segunda, que se inicia ahora, tendrá una primera actuación con una previsión de 75 árboles y 883 palmeras.
Las actuaciones las ejecutarán tres equipos integrados por dos camiones canastas y un brazo elevador.
La tercera fase comenzará en octubre y se desarrollará hasta diciembre y contempla actuaciones sobre cerca de 1.500 palmeras y más de 1.100 árboles con siete equipos integrados por un camión canasta y seis brazos elevadores.
Para desarrollar las actuaciones se seguirán criterios técnicos en arboricultura en los que se tendrán en cuenta las labores de poda del arbolado para garantizar su correcto desarrollo estructural y vegetativo.
«Estos trabajos son una herramienta fundamental para la detección de posibles incidencias en los ejemplares que no se aprecian a pie de calle y que nos puede indicar actuaciones a realizar como tratamientos fitosanitarios, apeos o tipología de poda a realizar», señala el edil del área, Diego López.
En lo concerniente a las palmeras, el concejal explica que «actuamos sobre las ramas secas y, sobre todo, en la eliminación de sus frutos o inflorescencias que pueden llegar a influir en la suciedad viaria. En principio, se hará sobre la especie Washingtonia Robusta y, una vez empiecen a bajar las temperaturas, en las Datiliferas, para minimizar la atracción que la poda puede ejercer sobre el picudo», destaca el concejal.
