Unos profesores se encargan de desarrollar la versión del sistema operativo que se instala en los equipos informático y otros contactan con las familias que recibirán los ordenadores, mientras que un grupo de alumnos revisan y, en su caso, reparan las máquinas que se ceden.

Aceptan ordenadores en desuso, dispositivos electrónicos obsoletos o soportes informáticos desechados; cualquier equipo que, debido al transcurso del tiempo, no se utilice y que, tras una puesta a punto, un adecuado mantenimiento y la instalación de un software que les obligue a tener menos requerimientos físicos, puedan reciclarse, tener una segunda vida y ayudar a los estudiantes con menos recursos económicos a combatir la brecha digital.

El Instituto de Educación Secundaria Guadalpín, en Marbella, ha puesto en marcha OrUs, un proyecto cuyo objetivo es recuperar equipos informáticos anticuados para facilitar la educación telemática a alumnos de secundaria, bachillerato o ciclos formativos y cuyas familias carezcan de medios económicos para adquirir este tipo de dispositivos para el seguimiento de los contenidos escolares.

Los profesores del instituto marbellí pusieron en funcionaminento el proyecto durante el pasado curso escolar tras detectar las necesidades en el ámbito digital entre diferentes alumnos del centro. Durante ese curso, 35 alumnos se beneficiaron de la cesión de los dispositivos informáticos rehabilitados en un proyecto que tuvo especial protagonismo a partir de marzo, con la entrada en vigor del confinamiento domiciliario aprobado por el Gobierno central para hacer frente a la pandemia del coronavirus y, con él, el cese de la enseñanza presencial.

Durante los meses del estado de emergencia y las restricciones a la movilidad, la entrega de los equipos informáticos la realizaron agentes de la Policía Local y voluntarios de Protección Civil de Marbella, Istán y Ojén.

Desde el inicio de este curso académico, los integrantes del proyecto han recibido cerca de 40 peticiones de cesión de equipos informáticos para continuar la formación en casa, de las que han atendido a más de 30.

La iniciativa, que se basa en el reciclaje, puesta en funcionamiento y cesión de material informático a alumnado con necesidades de herramientas en Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC), es un intento de proveer a los alumnos de equipos para el seguimiento de las prácticas y tareas escolares en casa, destaca el instituto, que anima a empresas y organizaciones públicas a cederles el material informático desechado para que los integrantes del proyecto lo reciclen y lo puedan utilizar más alumnos para seguir su formación en la distancia.

«Muchos de los equipos que habitualmente tenemos en los centros educativos provienen de dotaciones a ciclos que han quedado obsoletas y han pasado a formar parte de las aulas de informática para secundaria y bachillerato», explica la jefa del proyecto, Manoli Sarmiento.

«En otras ocasiones son equipos procedentes de donaciones de empresas con las que tenemos contactos para la realización de la Formación en Centros de Trabajo o de instituciones», agrega Sarmiento, que anima a que otros centros educativos pongan en marcha iniciativas similares para ayudar a los alumnos más vulnerables ante la brecha digital y promover la igualdad en el acceso a la educación a distancia, especialmente en plena pandemia del Covid-19.

El profesor de TIC del instituto, Daniel Sánchez, destaca que el proyecto, que cuenta con el apoyo de personal docente de varios centros educativos de la Costa del Sol, «nació con la idea de involucrar a los alumnos del ciclo formativo en la puesta a punto de aquellos equipos que, tras su vida útil, se han ido descartando».