Las melodías de la banda municipal de música se volvieron a oír anoche por las calles de Estepona pero, no precisamente, para dar un concierto. Los músicos protestaban porque el Ayuntamiento les adeuda 16 meses de salario, a pesar de que muchos de los integrantes de la banda han ganado sentencias judiciales y tienen que formar parte de la plantilla municipal como personal laboral.

A esta reivindicación salarial se une también la queja de los músicos por las instalaciones en las que están obligados a ensayar cada semana. Unas dependencias que, según denunciaron, están llenas de suciedad, humedad e incluso de cucarachas. En este sentido, los músicos exigen al Ayuntamiento que, al menos, les ofrezca unas instalaciones adecuadas y limpias para poder realizar su trabajo. Pero aquí no acaban las protestas ya que los músicos se quejaron de la dejadez del Consistorio y de la falta de financiación para comprar instrumentos y mantener los que ya hay.