Ha sido portada en muchos medios y era una de las bodas más esperadas. Tamara Falcó e Iñigo Onieva se casaron el pasado sábado 8 de julio y aparte de ser una de las bodas más virales del momento, también ha dejado momentos que no son fáciles de olvidar y otros contratiempos no muy esperados. Para los seguidores del ya actual matrimonio, estarán al tanto del momento de tensión vivido con el sacerdote.

Tensión en plena ceremonia

Aunque fue una boda marcada por el romanticismo, otros momentos también se les quedaron grabados a los asistentes y seguidores de la ceremonia. Lo que nadie se esperaba era que la casulla del sacerdote comenzase a arder, ya que estaba muy cerca de varias velas encendidas. Ahora, el Padre Cruz, protagonista de este incidente, ha dado los detalles de lo ocurrido en una entrevista exclusiva.

"Pudo haber peligro por una vela que había en el suelo, pero bueno, dejémoslo ahí", afirmó el Padre Cruz. "Ya podemos hablar de la boda sin restricciones. Fue una boda extraordinaria, los novios estaban emocionados. No había nervios, había un ambiente relajado, sin nervios, de mucho amor".

A pesar de que fue un susto para el sacerdote, no pudo evitar decir que fue una boda muy bonita del que él fue partícipe a pesar de su inesperado accidente. Varios invitados de la boda empatizaron sobre lo ocurrido con el incidente y el sacerdote dejando comentarios como: "Pobrecillo, se le ha quemado un poquito" pero a la vez su máxima preocupación.

A pesar del susto, la boda de Tamara Falcó e Íñigo Onieva continuó sin ningún otro contratiempo, y gracias a la actitud positiva del Padre Cruz el ambiente de paz y sobre todo, mucho amor estaba en el aire.