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Cartas al director

Andalucía versus Málaga

No lo sé, porque ya no lo recuerdo, adónde vamos, qué es de mi ciudad y qué de mi provincia. En el magma sin límites definidos de la Andalucía eterna, ya nadie recuerda quién es, dónde reside, de dónde venimos. En esta extraña Andalucía de progreso aferrada al vetusto sentido del todo bien sujeto y amarrado, ya nada se ofrenda en los aras provinciales y todo se sacrifica en el altar de las Cinco Llagas que laceran la vida de las lejanas ocho provincias que es donde en verdad nace y muere el andaluz.

Andalucía se cubre con una aterciopelada piel ribeteada de púrpura que todo lo tapa, lo disimula lo transforma. Lo trampea. Ante las dudas de identidad de mi ciudad y de mi pueblo está la unidad sin fisuras de una Junta que sostiene que nada es por sí, que todo es Andalucía, que nada existe fuera de ese ente impuesto e impostor que la Junta ha sacralizado. Nada que ver con aquella Andalucía entrañable; la de aquellos locos que creímos que esto de las autonomías era otra cosa, cómo de otra manera; un espacio en el que cada provincia tendría capacidad propia para avanzar secundada y apoyada por una Junta en la que siempre encontraríamos amparo. Aquella idea nos movió hace más de treinta años a aceptar las reglas del juego. Y hoy, pasado el tiempo, la formula no sólo no ha arraigado sino que aquello creído útil es hoy públicamente doloso para los intereses ciudadanos de la provincia de Málaga. Andalucía se muestra como un territorio demasiado grande y complejo de administrar. Es palpable que la Junta se ha transformado en una mastodóntica organización que lejos de resolver, complica hasta extremos imposibles la correcta gestión de tan extensa comunidad. Los delegados provinciales son meros espectadores de una realidad que ellos no gestionan y sólo la ven pasar delante de sus ojos. Y así los ciudadanos, a veces temerosos y siempre extrañados y faltos de confianza, nos aferramos a nuestros alcaldes como a hierros candentes. Andalucía se les ha ido de las manos a los políticos tal como lo comprobamos hoy con el PSOE y mañana tal vez con el PP, y urge tomar una postura decidida y valiente que nos haga reorientar nuestro destino. Los malagueños estamos abocados a tomar la decisión de gestionar nuestros propios recursos. Los acontecimientos aconsejan instaurar una Junta Provincial en Málaga capital y distribuir todas sus consejerías por el territorio, o bien plantear a la Junta un sistema de financiación tipo cupo vasco? donde administremos nuestros dineros y cedamos una parte al erario. Urge cualquiera de estas dos medidas para administrar nuestras capacidades y optimizar todo el esfuerzo que desarrolla la provincia una vez demostrado que seguir dirigidos desde Sevilla no nos permite avanzar con solvencia. Andalucía, como entidad única, se pierde en sus palos de ciego y Málaga está obligada a salirse de este camino una vez aprendido que es demasiado lento y de incierto destino.

Javier Fernández Borrego

Málaga

Las vírgenes suicidas

Hace solamente unos días hemos conocido el caso de diecisiete adolescentes que se han quedado embarazadas al mismo tiempo en un pequeño pueblo de Estados Unidos. Un lugar en el que, curiosamente, se habían recortado de los servicios educativos las clases de educación sexual al tiempo que se ponían impedimentos para obtener métodos anticonceptivos a las adolescentes. Sea como fuere, este pequeño ejército de vírgenes suicidas han querido jugar a ser mamás mucho más allá del Nenuco o de la Nancy; se han pasado directamente a los hijos de carne y hueso. Veremos cuando descubran que no se les acaban las pilas. Haciendo de abogado del diablo, considero que todo esto pone de manifiesto que las prohibiciones y restricciones provocan un repunte de aquello que intentan impedir. La información y educación sexual debería ser incuestionable en cualquier sistema educativo.

Por otro lado, la banalización de la maternidad y paternidad en nuestros días, parece convertir a los recién llegados a este mundo en un "medio para..." más que en un fin en sí mismos.

Ignacio Caballero Botica

Málaga

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