Los traslados de la Magna: cuenta a cuenta y misterio a misterio

Las imágenes del Cristo de la Columna y la Virgen de Consolación y Lágrimas ya se encuentran en sus casas hermandad para participar este próximo sábado, 30 de octubre, en la procesión magna 'Camino de la Gloria', que organiza la Agrupación de Cofradías con motivo de su centenario fundacional. Ambos titulares fueron trasladados en la noche del sábado desde sus sedes canónicas, en sencillas andas.

La semana de vísperas verá cómo la mayoría de las imágenes que participarán en esta extraordinaria tendrán que ser llevadas hasta el lugar de donde saldrán sobre sus tronos procesionales. El viernes fueron los primeros, con las imágenes de la Virgen de la Esperanza y la Virgen de los Dolores. Y este sábado, con el Centro abarrotado por las salidas extraordinarias también de la Paloma y la Oliva, Gitanos y la Sangre han aprovechado para llevar a cabo este tránsito. 

En un caso, desde la iglesia de San Juan, donde reside la corporación de forma provisional por las obras de los Santos Mártires. A las 20.00 horas salía la procesión, que contaba con el acompañamiento musical de la banda de cornetas y tambores de la propia cofradía, que por fin podía estrenarse tras su sagrado titular tras años de espera por culpa de la pandemia. El Señor, con pureza morada y sencillos bordados, y con potencias sobre su testa, e iluminado por dos elegantes fanales, recorrió el itinerario previsto hasta la calle Frailes, haciendo estación ante el oratorio de Santa María Reina, de la hermandad de las Penas, que recibió a la comitiva de forma corporativa. La procesión también se detuvo en la iglesia de Las Catalinas, sede de Viñeros.

En otro caso, la Virgen de Consolación y Lágrimas salía de su sede canónica, la iglesia de San Felipe Neri, al término de una eucaristía y en rosario vespertino. Iluminada por cuatro sencillas velas, la imagen, totalmente de blanco, seguía el nutrido camino de velas que le proporcionaban sus hermanos y devotos y completaba el recorrido por el entorno parroquial, cuenta a cuenta y misterio a misterio, hasta la casa hermandad en la calle Dos Aceras. Es la primera vez que la Virgen salía a la calle tras la restauración a la que fue sometida por Francisco Naranjo en enero de 2020.

Fusionadas y Pollinica

Las Reales Cofradías Fusionadas de San Juan han llevado a cabo el traslado del Cristo de la Exaltación, a hombros, y de la Virgen del Mayor Dolor y San Juan Evangelista, en andas, desde su parroquia hasta la nueva casa hermandad del Pasillo de Santa Isabel, durante la mañana de este domingo. El breve itinerario ha transcurrido por Calderón de la Barca, Fernán González y Cisneros. 

Los tres titulares saldrán en el mismo trono en la procesión Magna, conformando una escena inédita pero prevista por Dubé de Luque cuando en los primeros años de la década de los 80 diseñó el grupo escultórico que acompaña al Crucificado. 

Por su parte, dentro de este intenso fin de semana cofrade con una agenda tan sumamente apretada como pocos recuerdan, la Pollinica también celebró el traslado de Jesús en su Entrada Triunfal en Jerusalén y de San Juan Evangelista, que forma parte del grupo escultórico, desde la iglesia de San Agustín hasta la casa hermandad, en la calle Parras. Las imágenes fueron en andas independientes.