Semana Santa 2024

El Rico, por encima de las adversidades

La cofradía de El Rico cumplió con el privilegio que supone indultar a un preso, que a la vez es un deber con la historia y con la libertad que cumple todos los años por encima de cualquier obstáculo. Este Miércoles Santo no fue una excepción

Miguel Ferrary

Miguel Ferrary

Si algo tenían claro en la cofradía de El Rico es que saldrían este Miércoles Santo. Su compromiso está por encima de cualquier parte meteorológico, porque está en juego la libertad y la vida de una persona. Un malagueño que esperaba este día para recibir una segunda oportunidad con la que rehacer su vida y dejar atrás errores del pasado. Eso no lo podía impedir la lluvia, como nunca lo ha hecho hasta ahora, ni lo hizo la pandemia. Sabiendo esto, el ambiente en la cofradía de El Rico era de relativa tranquilidad. Solo faltaba saber el cómo y el cuándo. Pero se saldría.

Pasadas las cinco de la tarde se anunciaba a los hermanos que se saldría a realizar el acto de liberación de El Rico en la plaza del Obispo, sin pasar por el recorrido oficial. Irían con el cortejo completo aprovechando que la lluvia se esperaba a partir de las 22.00 horas, según los partes de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) que manejaba la cofradía. Rápidamente empezaron a organizar la procesión, con la entrada de los portadores al salón de tronos. Mientras, en la iglesia de Santiago los nazarenos empezando a ponerse en marcha para unir el cortejo al trono en la plaza de la Merced

Liberación del preso por la cofradía de Nuestro Padre Jesús El Rico, la única que salió a la calle el Miércoles Santo.

El trono de Jesús El Rico salió a la calle con algo de lluvia. / Álex Zea

La apertura de las puertas fue recibida con ilusión. Pero el inicio fue accidentado. Justo cuando el trono salía a la calle, empezaron a caer algunas gotas, que se fueron multiplicando según avanzaba por la calle Victoria para entrar en Alcazabilla a ritmo rápido y bajo un chubasco bastante intenso. La Virgen del Amor se quedó en la casa hermandad cuando estaba a punto de salir. Esa lluvia aconsejó a la hermandad a conservarla.

En Alcazabilla hubo ciertos nervios. Los mayordomos empujaban al cortejo para acelerar el paso y dejar espacio al trono, que iba a tambor. Al llegar a la altura de las casas hermandad de Estudiantes y Sepulcro la lluvia empezaba a remitir y la Banda Sinfónica de la Trinidad interpretó ‘Rico en Amor’, la primera marcha que había podido tocar desde la salida. El trono frenó y acompasó el paso a la marcha. Poco a poco la tranquilidad volvía al cortejo y la lluvia desaparecía, entrando a la calle Cister con una curva suave y mecida. 

Pese a la mayor estabilidad en el tiempo, la hermandad no se confiaba y mantuvo un ritmo vivo hacia la plaza del Obispo, entrando con la marcha ‘Santo Traslado’ a Molina Lario y disponiéndose todo para el acto de liberación. “Vamos a hacerlo bien, por los policías que han dado su vida y por los hermanos fallecidos”, gritaba un mayordomo de trono a los portadores. A cada lado de la calle, una escolta de agentes de la Policía Nacional recibía al trono en su entrada a la plaza del Obispo. 

Procesión de vuelta y encierro de la cofradía de El Rico, el Miércoles Santo de 2024.

Nazarenos de El Rico en la escalinata de la Catedral. / Miguel Ferrary

En la escalinata de la Puerta de la Encarnación esperaban ya los nazarenos. Un mar de capirotes morados y una amplia sección de faraonas ocupaban la escalera. Ariadna, Judith, Aitana y su hermana Paula, que se estrenaba este año, eran algunas de las pocas afortunadas que habían podido salir este Miércoles Santo huérfano de procesiones y que podrán recordar con orgullo.

Liberación

El sentido de la procesión de El Rico se encontraba en la plaza del Obispo, donde el malagueño J. M. R. S. esperaba nervioso a la firma del indulto que adelantaría su salida de la cárcel más de un año. Una oportunidad para ganar tiempo a una nueva vida. 

El acto fue seguido por una plaza del Obispo abarrotada de público. Autoridades civiles, policiales y religiosas eran conscientes de la solemnidad del acto, pero también de cómo el perdón y la generosidad podían cambiar vidas, en concreto la del malagueño que fue liberado por la Pragmática Sanción de Carlos III. Tras la firma del indulto, J. M. R. S. se incorporaba a la procesión con túnica y capucha negra delante del trono y después de recibir la bendición del Nazareno, con todos los hombres de trono de rodillas y mientras sonaba el Himno Nacional.

Liberación del preso por la cofradía de Nuestro Padre Jesús El Rico, la única que salió a la calle el Miércoles Santo.

José Manuel, el preso indultado por Jesús El Rico. / Álex Zea

Regreso

Este Miércoles Santo hemos estados todos los malagueños huérfanos de procesiones, pero se compensó con un trono de Jesús El Rico que, en el corto recorrido que tenía, lo aprovechó para demostrar su buen hacer. Pese a que empezó a chispear, nadie se puso nervioso y empezó a andar. Sin bajar el trono desde Molina Lario hasta la altura del cine Albéniz. Todo Cister y más de la mitad de Alcazabilla de un tirón, a paso suave y manteniendo el ritmo en todo momento. Ni lluvia ni prisas. La música marcaba el ritmo. Cinco marchas enlazadas por la Banda Sinfónica la Trinidad en un repertorio exquisito: 'Hosanna in Excelsis', 'La madrugá', 'El Hijo del Amor', 'Ave María' y 'Procesión de Semana Santa en Sevilla'. "Por todos los hermanos de otras cofradías que no han podido salir este Miércoles Santo". Y vaya si lo hicieron. Una locura preciosa.

Procesión de vuelta y encierro de la cofradía de El Rico, el Miércoles Santo de 2024.

Procesión de vuelta de la cofradía de El Rico. / Miguel Ferrary

Encierro

Cuando el trono de Jesús llegó al encierro, se paró y se bajó. Le tocaba el turno a la Virgen del Amor, que se había quedado en la casa hermandad. Sus portadores la mecieron, la sacaron a la calle, le gritaron “guapa” y las campanas de los mayordomos de nazareno repiquetearon con alegría. Fue un momento, pero al menos la Virgen pudo recibir a su Hijo. El Himno Nacional y los agentes de la Policía Nacional saludando fue la imagen final de la única procesión del Miércoles Santo.