Acceso a la formación superior

Un informe denuncia el acceso desigual a la universidad por culpa de la selectividad: "Con los mismos conocimientos, puedes sacar un 8 o un 6"

Escuela de Todos pide que las pruebas tengan una estructura común, respeten los contenidos mínimos que fija el Gobierno y criterios de corrección idénticos en todas las autonomías

Alumnos de 2º de bachillerato, preparándose un examen de selectividad, en un instituto de Barcelona.

Alumnos de 2º de bachillerato, preparándose un examen de selectividad, en un instituto de Barcelona. / DANNY CAMINAL

Olga Pereda

Con los mismos conocimientos y competencias, un alumno puede sacar un 8 en la selectividad o un 6. Todo depende de la comunidad autónoma en la que se examine. Así lo dictamina un estudio elaborado por Escuela de Todos, asociación implantada en toda España que nació en Cataluña en 2021 y que se ha distinguido por combatir en los tribunales la política de inmersión lingüística en la escuela.

La selectividad -que este año se celebra en Cataluña el 4, 5 y 6 de junio- es el paso fundamental para todos aquellos que aspiran a entrar en la universidad. La nota de la PAU (Prueba de Acceso a la Universidad) cuenta un 40% mientras que la de bachillerato lo hace en un 60%.

Comparando los exámenes de acceso a la universidad que se realizaron el año pasado en las 17 autonomías en matemáticas, lengua e historia, el informe deja claro que las pruebas “no son homologables”. No lo son ni por el contenido (algunos territorios hacen caso omiso de los contenidos mínimos fijados por el Ministerio de Educación) ni por el tipo de enunciados. Tampoco por la extensión de las respuestas de los alumnos ni por los criterios de corrección del profesorado.

Faltas de ortografía

En Extremadura, un estudiante que cometa hasta 5 errores ortográficos (la acentuación no está incluida, se valora de otra manera) en uno de los exámenes, lo suspende automáticamente mientras que en Cataluña se le penaliza con medio punto (lo mismo que cinco errores de tildes), al igual que en Galicia. Baleares no descuenta por errores, a no ser que el estudiante cometa 26 faltas: dos puntos menos. En el extremo están Murcia, que castiga con dos puntos y medio tener cinco errores en la grafía, y Castilla-La Mancha, que resta tres. Cataluña es la comunidad que más duramente sanciona las faltas de ortografía, pero a partir de 26 faltas en un mismo examen: 2,6 puntos menos. Mientras, en Euskadi y La Rioja, no se concreta el descuento que conllevan las faltas ortográficas (ni de grafía ni de tilde).

La selectividad -en la que tienen competencias tanto el Gobierno, como las autonomías y las universidades- es punto de fricción política. El PP, y las comunidades gobernadas por el partido que lidera Alberto Núñez Feijóo, llevan años exigiendo una selectividad única en toda España. El Ministerio de Educación, sin embargo, no lo admite. Asegura que no solo es innecesaria sino también “imposible desde el punto de vista legal”.

La intención del departamento que dirige Pilar Alegría es que, a partir del año que viene, haya cierta homologación en los criterios de corrección, incluida la penalización de las faltas de ortografía. El borrador ministerial, por ejemplo, apuesta porque las faltas bajen hasta un 10% de la nota.

"La selectividad es dispar. No hay coordinación entre las autonomías sino competencia desleal. No hay igualdad de oportunidades para los alumnos"

Ana Losada

— Escuela para Todos

Distrito único

Escuela de Todos pide que la selectividad sea una prueba homologable en todas las autonomías dado que la universidad funciona como distrito único y los estudiantes pueden aspirar a entrar en cualquier universidad del territorio español siempre y cuando tenga nota suficiente. El objetivo de la plataforma -en la que actualmente hay 15 asociaciones- es que la EBAU (Evaluación del Bachillerato para el Acceso a la Universidad, término como se conoce a la selectividad en muchas autonomías) tenga una “estructura común” y respeten los contenidos mínimos fijados por el Gobierno.

“La selectividad es dispar. No hay coordinación entre las autonomías sino competencia desleal. La conclusión es que no hay igualdad de oportunidades para los alumnos”, ha sentenciado Ana Losada esta mañana, durante la presentación del estudio.

La orden ministerial que rige actualmente la selectividad asegura que, en matemáticas II (las matemáticas de la rama científica) debe haber varios contenidos: álgebra, geometría, análisis y estadística. Cinco autonomías -Andalucía, Aragón, Castilla La Mancha y Cataluña- incumplen este mandato. “En Cataluña, no hay rastro de estadística y geometría cuenta menos del 20%”, asegura el informe, que también pone de manifiesto el bajo número de preguntas optativas (que los estudiantes pueden no contestar) que hay en las pruebas catalanas, lo que las convierten en más difíciles. Ese bajo nivel no se da, sin embargo, en otras materias, como lengua y literatura, donde los autores del estudio han encontrado un considerable desequilibrio: los contenidos del bloque de educación literaria no aparecen, al contrario de los de conocimiento de la lengua, que acaparan un 50%.