El baloncesto malagueño escribió ayer una de las páginas más tristes de su historia. Mientras el Ayuntamiento de Málaga (PP) y la Consejería de Educación (PSOE) de la Junta se pasan la pelota y aún ni siquiera han firmado el convenio regulador pactado el pasado 17 de julio, el consejo escolar del CEIP Lex Flavia Malacitana decidió ayer que desde el lunes ya no podrán usar sus instalaciones los 15 equipos y los 260 niños y niñas del Club Deportivo Adesa Málaga de baloncesto. Un mazazo al deporte base malagueño y al básket en particular. Del que, por desgracia, no están exentas otras disciplinas deportivas, a poco que se produzcan nuevas denuncias vecinales por exceso de ruido.

La fuerza de un solo malagueño ha sido más poderosa que la actividad de un club de baloncesto. La denuncia de un vecino próximo al colegio hizo que el Área de Sostenibilidad Medioambiental del Ayuntamiento de Málaga abriera expediente a la Consejería de Educación (por ser propietario del colegio), con una propuesta de sanción -según la ordenanza municipal de Prevención y Control de Ruido- de 12.001 euros y el apercibimiento de cierre. Ahora este vecino ha mostrado su intención a la dirección del colegio de interponer una querella por la vía penal por el ruido que los equipos del Adesa siguen haciendo. Y el consejo escolar, atado de pies y manos, ha decidido poner fin a su relación con el club.

Desde el lunes, el Adesa ya no podrá utilizar las instalaciones del LEX Flavia. Ha de limitarse a las de su centro matriz, muy masificadas. El Área de Deportes del Ayuntamiento ya había habilitado pistas en Ciudad Jardín, tres días a la semana, de 20.00 a 22.00. Ahora van a ampliar todos esos horarios y van a tratar de ofrecer más pistas, al aire libre. También la Delegación en Málaga de la Federación Andaluza de Baloncesto acogerá tanto entrenamientos como partidos de varios de los equipos, en sus pistas de Teatinos.

Y, mientras tanto, el nuevo convenio regulador aún está en fase de alegaciones, entre el Ayuntamiento y la Consejería de Educación. Por cierto que no hay ni rastro de las obras a las que se comprometió el consistorio para aliviar el ruido y amortiguarlo, con la colocación de pantallas.

El Adesa vive una situación límite mientras que respira aliviado otro de los clubes que estaban entre la espada y la pared. La denuncia vecinal que se había interpuesto al Málaga Básket por el ruido que hacía durante los entrenamiento y partidos en el CEIP Félix Revello de Toro ha sido retirada. El club respira tranquilo. Quien sigue también amenazado es el Puerta Oscura, que se entrena en el IES Jardines Puerta Oscura.