El nuevo Unicaja de Luis Casimiro echa a andar esta tarde en el Martín Carpena. Tras la semana más convulsa de los últimos tiempos, con la salida de Chus Mateo y la llegada del nuevo inquilino al banco, hoy el Lucentum de Alicante será el que mida el grado de reacción deportiva de un equipo que necesita ganar sí o también para seguir soñando con una plaza en el play off por el título y con retener su billete asegurado para la próxima Euroliga.

Poco tiempo ha tenido el entrenador manchego para ponerse al día. Pero es lo que hay. Quedan 9 partidos para que acabe la Fase Regular y hoy empieza la cuenta atrás para sumar al menos 5 triunfos que aseguren el billete para las eliminatorias por el título.

Hay varias preguntas en el ambiente. Ayer, al filo de las 20 horas, se contestó a la primera. DeVries y Darden son los dos extracomunitarios elegidos por Casimiro para vestirse hoy ante el equipo de Alicante. Payne fue dado ayer de baja y Fitch, que no contaba para Chus, tampoco parece que lo haga con el nuevo entrenador. Pero todavía hay muchas más incógnitas en el ambiente. Rowland o Valters, ¿a quién dará el coach galones en la dirección? ¿Seguirá Sinanovic sólo calentando banco? ¿El cambio de entrenador hará recuperar su mejor nivel a Freeland? ¿Peric jugará de «3» y de «4»? ¿Tendrá más protagonismo Lima que en la anterior etapa? ¿La defensa será la piedra angular sobre el que se edificará el nuevo Unicaja?...

Pero por encima de todas, la gran pregunta es saber el estado de ánimo con el que el Carpena afrontará hoy el partido. Sin televisión en directo y con lo mucho que hay en juego, es de esperar que la grada esté a tope y volcada con su equipo. Es hora de mirar al frente y olvidar el pasado. El Palacio siempre ha sido talismán para el equipo. En los buenos y en los malos momentos. Hoy es el día perfecto para aunar fuerzas plantilla-grada. Para luchar en común en busca de un triunfo que corte la maldita mala racha y haga al equipo escalar en la tabla camino del lugar en el que casi siempre ha estado durante la temporada.

Regresa Darden. La mejor noticia deportiva con la que encara el partido el equipo verde es la vuelta a las pistas de Tremmell Darden. Con él, el Unicaja firmó su mejor parte de la temporada. Una maldita lesión en la visita europea a Kaunas frenó su progresión e hizo poco a poco dudar al resto del equipo. Regresó varias semanas después, pero volvió a recaer. Dicen los técnicos que está muy lejos del cien por cien, pero que está para ayudar. Ojalá.

El que sin embardo lo tiene casi imposible es el canterano Álex Abrines. Ayer tampoco se entrenó y salvo recuperación milagrosa en la sesión de tiro de esta mañana, será baja para medirse al Lucentum.

Los alicantinos llegan a Málaga con la moral alta después de frenar el pasado fin de semana la racha triunfal del Lagun Aro, con una victoria convincente por 79-68. Su mala racha de resultados en este 2012 era equiparable a la de los verdes, pero tras ese triunfo han recuperado la quinta plaza en la clasificación.

Los de Vidorreta fueron durante toda la primera vuelta el equipo revelación y hoy serán un hueso duro de roer. El recuperado Ellis, la dirección del joven Llompart y el poderío de Ivanov -algo tocado para esta tarde-noche- son las principales amenazas de los de Alicante, aquejados, eso sí, de innumerables problemas económicos.

Ganar, ganar y ganar. Es lo único que vale en este día especial en el que el Unicaja pone el contador a 0. Todo vuelve a empezar, aunque sólo con 9 partidos por delante y la necesidad de no fallar más.