El desplome en España de Li Ning, la marcha china que vistió al Unicaja la pasada temporada, obligó al club a maniobrar con rapidez este verano. De un día para otro, el Unicaja se encontró sin suministrador de material deportivo, cuando había firmado un contrato de tres años con el gigante asiático el pasado curso. Al casting de sustitutos de presentaron varias marcas, entre ellas Hummel y Vive, y el Unicaja escogió a Hummel, marca con la que trabajó con excelentes resultados durante el último lustro.

Hummel ya presentó, de manera virtual, la camiseta de juego para el primer equipo, pero aún no envió material alguno hasta mediados de esta semana. La firma danesa hizo llegar hasta Los Guindos la avanzadilla de su material, con ropa de entrenamiento para estos primeros días de pretemporada. Pero el resultado no ha sido el deseado. Los jugadores se han quejado porque la ropa no es lo suficientemente cómoda y a muchos les ha creado rozaduras y heridas sin importancia pero molestas. El malestar dentro del grupo llevó al vestuario a plantear al club la retirada de esta ropa de entreno.

Y así ha sido. El Unicaja se puso entre el jueves y ayer viernes en contacto con Hummel y le devolvió todo el material, instándole a que mejore el pack que envió en días pasados. Así, el equipo ha vuelto a entrenarse con ropa Li Ning, de la pasada campaña, con la que no hay molestias ni problemas.