Defensa al límite de la falta, trabajar bien el rebote y volar por la pista camino del aro rival. Además, una palabra clave que sale en cada charla, en cada tiempo muerto y en cada sesión de trabajo táctico, físico o técnico: «concentración». Esos son los principios básicos sobre los que quiere asentar Jasmin Repesa su primer proyecto deportivo en Málaga. Un baloncesto atractivo a la vista y que se espera pueda devolver al Unicaja a la zona alta de la clasificación de la Liga Endesa y a ser más competitivo en la competición continental.

El lunes cerró el equipo los amistosos de pretemporada en Lleida con una contundente victoria contra el rival de menos caché de los ocho que ha tenido en frente durante este mes largo de preparación. Los números son aceptables: seis victorias y dos derrotas, tras ocho partidos. Se ganó un par de veces al Cibona croata, al Cajasol en la final de la Copa de Andalucía, al CAI Zaragoza, al Manresa y al Lleida. Las derrotas, ante el Real Madrid -rival el próximo domingo en el primer partido de Liga en cancha merengue- y el UCAM Murcia, en un amistoso en Córdoba.

Más que los resultados, que en pretemporada valen para bien poco, lo mejor son las sensaciones. El equipo ha demostrado contar con una plantilla larga en la que las rotaciones lejos de ser un problema sirven para que los que están en la pista lo hagan al máximo nivel en cada minuto.

Entre las principales virtudes está la buena defensa practicada en los amistosos. El equipo ha encajado una media de 67.6 puntos. El Real Madrid y el CAI Zaragoza le endosaron 82, respectivamente, pero hasta tres equipos no fueron capaces de llegar a los 60: Cibona (57), Cajasol (53) y Manresa (55).

El equipo sí ha mostrado más debilidades en el aspecto ofensivo. Ha anotado 77,5 puntos de media, una cifra muy buena a nivel general, pero que esconde ciertas lagunas en el tiro exterior. Sobre todo ha estado el equipo intermitente en sus porcentajes de acierto desde la línea de 6,75. Ha alternado días súper con otros en los que los triples han sido un quebradero de cabeza. Y buscar el equilibrio en el lanzamiento exterior debe ser ahora una prioridad.

La expedición regresó ayer de la concentración de pretemporada en el Pirineo catalán y a partir de hoy retoma sus sesiones de trabajo en el Martín Carpena para preparar el debut en la Liga Endesa, el domingo, en Madrid. Antes, el viernes, presentación del equipo en el Muelle 1.