Las mismas derrotas que en el curso pasado

Hay muchos datos que ayudan a explicar el durísimo varapalo sufrido por el Unicaja en esta primera vuelta de la Liga Endesa. Aunque quizá el que mejor resuma la actual situación es el hecho de echar la vista atrás y ver la posición del equipo hace justo un año, cuando acabó la primera vuelta de la Fase Regular en la jornada 17 y los ocho mejores se clasificaron para la Copa del Rey de Las Palmas 2015.

El Unicaja ha encajado ya las mismas derrotas que en toda la temporada pasada. El equipo de Joan Plaza acabó la Fase Regular del curso 2014/15 con un balance de 25 triunfos y nueve derrotas en 34 partidos. En tan sólo la mitad de tiempo, con 17 jornadas disputadas en el presente curso liguero, el Unicaja ya ha igualado los tropiezos de toda la pasada campaña. Su actual registro es de ocho triunfos y nueve derrotas. Los números, por desgracia, hablan solos. Y su veredicto es que el equipo está muy lejos de lo esperado en la Liga Endesa, no está cumpliendo los objetivos mínimos y urge, por lo tanto, una rápida rectificación.

Y es que el Unicaja era el líder de la ACB justo cuando se produjo el corte copero en 2015, con un récord de 14 triunfos y únicamente tres caídas. Eran otros tiempos, que parecen ya tan lejanos... Ahora, sin embargo, los malagueños se han quedado fuera de la Copa, llevando la desazón a su masa social, tremendamente enojada.

El Unicaja se obliga, de esta forma, a realizar una segunda vuelta al más alto nivel si quiere enmendar la situación. Jugar los play off es el otro objetivo mínimo que se le exige a esta plantilla y al cuerpo técnico, que no han estado a la altura de las expectativas. Urge una mejoría en la competición española, ya que es el auténtico salvavidas en estos momentos. Fiarlo todo a las opciones -reales- de jugar el Top 8 sería una temeridad.

El equipo debe hacer examen de conciencia y cambiar todo lo malo hecho hasta ahora en la ACB. Hay tiempo y quedan 17 jornadas por delante. El objetivo debe ser el quinto puesto. Ahora se ve como un imposible. Pero hay plantilla para lograrlo.