El Colegio de Economistas de Málaga ha vaticinado hoy que la economía de la provincia mantendrá este año una buena tónica de crecimiento aunque el ritmo se ralentizará en relación al 2015 debido, entre otros factores, al actual panorama de inestabilidad política y a la restricción del crédito al sector privado que mantienen los bancos. Según las previsiones del Colegio, el PIB de Málaga subirá en 2016 un 2,7%, frente al 3,3% con que cerró el pasado año y que supuso el mayor aumento porcentual en los años de crisis.
El decano de esta institución, Juan Carlos Robles, ha explicado que el menor ritmo económico se traducirá también en un crecimiento menos intenso del empleo. Las estimaciones del Colegio son que el número de afiliados crezca al 4% (el año pasado lo hizo al 5%), lo que en todo caso servirá para continuar reduciendo la tasa de paro. Si el año 2015 ha cerrado en Málaga con un 26,9%, los economistas calculan que el 2016 lo hará en el entorno del 23% o el 24%.
Los economistas han destacado el crecimiento experimentado por la economía malagueña en los dos últimos ejercicios, donde la tasa de paro se ha reducido en nueve puntos. Sin embargo, han recordado que Málaga necesita registrar ritmos de crecimientos mayores en su PIB para poder reducir más rápidamente las actuales cifras de paro, que siguen siendo "altísimas e insoportables". "Necesitamos más estabilidad política y más crédito a las empresas. El coche no se va a parar pero necesita más gasolina para correr más, que es lo que necesitamos con una tasa de paro tan alta", ha apuntado
En este 2016 se espera que el turismo ofrezca de nuevo un gran comportamiento y que el sector de la construcción retome definitivamente la actividad, después de que en el pasado año se haya triplicado la cifra de proyectos visados para la construcción de nuevas viviendas.
El vicepresidente de Colegio, Antonio Pedraza, sí ha manifestado su temor a que la actual incertidumbre política y el contexto internacional puedan retraer las inversiones privadas en la Costa del Sol, que son un pilar fundamental para la actividad. No obstante, ha reiterado su confianza en el devenir de la economía de la provincia, destacando también datos como el nuevo récord de las exportaciones en 2015 y la subida en la venta de vehículos. "La economía malagueña trae una inercia que le va a dar para seguir tirando", ha comentado.
