El nuevo alcalde de Marbella (Málaga), el socialista José Bernal, quiere dejar bien claro que el gobierno que preside viene a "abrir la ciudad a los inversores serios" en contra del discurso que el PP ha difundido de que el tetrapartito ahuyentará los grandes proyectos.

En una entrevista con Efe, Bernal ha insistido en que estos grandes inversores no deben tener miedo al nuevo ayuntamiento que está dirigido por PSOE y sus socios de gobierno: IU, Opción Sampedreña (OSP) y Costa del Sol Sí Puede (CSSP).

"Me he reunido con empresarios e inversores y lo primero que me han pedido es que, por favor, desbloquee la situación en la que se encontraban las inversiones privadas en el Ayuntamiento, donde se les ponían obstáculos de todos los colores y no salían inversiones importantes porque no se han sabido gestionar, se han paralizado los grandes proyectos", se queja el regidor.

A Bernal le molesta esa crítica del PP hacia un gobierno que todavía no ha empezado a rodar y por ello le va a pedir a los populares una oposición "contundente y dura hacia mi persona, pero no devaluando la imagen de Marbella, porque eso perjudica a la ciudad".

José Bernal, Pepe Bernal como le conocen en Marbella, es un historiador de 40 años, nacido en una familia de un barrio humilde (Leganitos) que pretende hacer, de esa humildad, seña de identidad.

"Ese grado de estar tan pegado al suelo hace que veas la realidad del día a día y lo que tengo que intentar es no elevarme mucho de ese suelo para seguir conociendo lo que pasa en Marbella y San Pedro Alcántara todos los días", aventura en su primer día en el cargo.

Señala que los 46 millones de superávit de los que presumía el anterior equipo de gobierno eran una "verdad a medias", pues aclara que esa cantidad no está en líquido en las arcas municipales y ahora toca "ser excesivamente austeros y recortar por donde se estaba derrochando para disponer de los máximos recursos para hacer más con menos".

El PSOE se embarca en este mandato en un gobierno con tres compañeros de viaje: IU y OSP, que se integrarán en el equipo de gobierno, y Costa del Sol Sí Puede -formación impulsada por Podemos- que apoyará, pero no participará en el gobierno municipal, al menos ocupando delegaciones.

Bernal confía en sus socios de gobierno, pero aún más en el programa consensuado con ellos, y basa el éxito de este proyecto y su continuidad en el cumplimiento de los puntos de dicho plan.

"Si ese programa no se termina cumpliendo, por los motivos que sea, entonces entenderemos que no hemos acertado y yo no voy a esperar moción de censura de nadie, seré el primero en dar un paso al lado", advierte Bernal que se enfrenta a la amenaza de OSP de revisar el pacto pasados dos años.

El sueldo del nuevo alcalde y sus concejales serán acordes a los de los técnicos del propio ayuntamiento, aunque las cantidades aún no se han fijado. Lo que sí tiene claro el alcalde y sus socios de gobierno es que hay que rebajar los salarios de los cargos de confianza.