Los días de Saúl Blanco como jugador del Unicaja se van agotando. El escolta asturiano está en mercado. El club ya le ha comunicado que no cuenta con él y que tiene libertad para marcharse a otro club de inmediato, siempre que pacte una rescisión de contrato satisfactoria para ambas partes. El Valladolid se ha interesado por él, pero el chico se ha negado a marcharse allí.

Ahora es, según informó ayer la web solobasket, el Fuenlabrada quien ha llamado a su puerta. En el equipo del sur de Madrid es donde despuntó y de allí vino a Málaga, a cambio de 800.000 euros. El club fuenlabreño, próximo rival del Unicaja a domicilio €7 de enero€, ya pidió hace una semana el préstamo de Augusto Lima, como informó este periódico. El Unicaja se negó. Y ahora ha vuelto a la carga, a por Saúl. La situación es muy diferente a la de Lima. El Unicaja sí que quiere desprenderse del escolta, que en 93 partidos en Málaga (64 de Liga y 29 de Euroliga), ha promediado 16:37 minutos, con 5,4 puntos, 1,9 rebotes y 5,3 de valoración.

De hecho, de los cuatro últimos encuentros, Chus Mateo sólo le ha utilizado en uno. Saúl ya sabe por boca de los responsables de la entidad que no cuenta en el presente ni para el futuro. Y es más, una vez que Augusto Lima obtenga su pasaporte español, jure la Constitución y pase a ser «cupo», el asturiano saldrá del «doce» del Unicaja. En Sevilla fue Lima quien no entró en la convocatoria, porque es extracomunitario, y Fitch y Payne ocupan su lugar. Pero una vez que el brasileño obtenga la doble nacionalidad ocupará la plaza de Saúl Blanco. El asturiano ya es consiente de que sus días en Málaga están contados y deberá mostrar su talento en otro equipo. Quizá, en Fuenlabrada.