Nunca Estambul ha sido una plaza fácil en la Euroliga para el Unicaja ni para cualquier otro equipo visitante. Históricamente, ganar a la sombra del Gran Bazar y de la Mezquita Azul en la máxima competición continental siempre ha exigido al rival un sobreesfuerzo que a veces ni siquiera ha sido pasaporte al éxito en la capital otomana. Fenerbahce, Galatasaray, Darussafaka o este Efes que visita hoy a partir de las 18:30 horas el Unicaja son proyectos multimillonarios, plagados de jugadores con un talento descomunal y que (casi) siempre son favoritos cuando juegan al amparo de su afición.

Pero la historia le hace hoy un pequeño guiño al Unicaja en su visita a la gran urbe otomana. Y es que el Unicaja se va a medir esta tarde a la peor versión del Efes que se recuerda en Europa. Los cerveceros son ahora mismo colistas de la Euroliga con cuatro derrotas en otras tantas jornadas. Cifras inauditas e impensables para un equipo que cada temporada inicia la Euroliga con el mismo objetivo: jugar la Final Four continental.

Los estambulís, desde luego, no atraviesan por su mejor momento. Es verdad que su calendario ha sido criminal, con derrotas caseras ante Real Madrid y CSKA y fuera de Estambul en las pistas de Fenerbahce y de Valencia. O sea, ante cuatro de los equipos más en forma de Europa. Lo que pasa es que la imagen no ha sido nada buena y en ninguno de los cuatro partidos han tenido opciones serias de llegar a los últimos minutos con posibilidad de ganar. Su poca actitud para competir es a lo que se puede agarrar esta noche el Unicaja para intenta sumar un triunfo que valdría oro puro en su complicado caminar continental.

La verdad es que el Efes, resultados al margen, tiene una plantilla que da miedo (como el 90% de las de esta Euroliga). Velimir Perasovic tiene de todo a sus órdenes: experiencia, juventud, tiro exterior, kilos en la pintura, músculo... O sea, que para ganar a este sorprendente « último de la fila» europeo habrá que hacerlo entre bien y muy bien los 40 minutos. Si no...

Los de "Peras" cuentan con dos caras muy conocidas para la afición cajista. Y es que el internacional serbio Vladimir Stimac y el internacional croata Krunoslav Simon son dos de los jugadores que el Unicaja tendrá hoy en frente. Sobre todo el balcánico está siendo en este arranque de Euroliga uno de los mejores jugadores del Efes. Además de ellos, la gran amenaza es su tripleta norteamericana: Errick McCollum, Ricky Ledo y Bryant Dunston. El primero de ellos, por cierto, uno de esos muchos bases que el pasado verano estuvieron en la agenda cajista. Es muy bueno y frenarlo será clave para poder ganar en Estambul.

El Unicaja viajó ayer hasta la capital otomana con la duda del estado físico de Dani Díez. El alero madrileño arrastra un golpe en el gemelo desde el martes que le tiene renqueante. Que ayer se montara en el avión es una buena noticia y hace ser optimistas con que pueda vestirse hoy de corto. No obstante su evolución estas horas previas al partido serán las que dictaminen si juega o no.

Después de tres «euroderrotas» consecutivas y tras la mala imagen dada la semana pasada en La Fonteta, el Unicaja deberá hacer hoy borrón y cuenta nueva para asaltar un pabellón que, por otro lado, es uno de los más vacíos y menos calientes de toda Europa. En el Sinan Erdem Dome caben 16.000 aficionados y, salvo sorpresa, esta tarde no habrá más de 5.000 en sus gradas, la mayoría de ellos grupos de colegiales invitados por el propio club cervecero. Un ambiente «amable» que también puede ayudar a intentarlo.

Estamos en la jornada 5 de las 30 de esta Liga Regular continental. Queda mucho por delante, pero el objetivo de estar entre los 8 mejores requiere ir sumando victorias ¡ya! Lo de ir a una «guerra» cuerpo a cuerpo en Estambul frente al Efes quizás no entraba entre las previsiones hace un mes cuando arrancó esta Euroliga. Pero, visto lo visto, tal y como está el rival y los problemas que está mostrando para incluso competir en los partidos europeos... ¿por qué no?