El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, manifestó ayer en Sevilla que las discrepancias que han existido en el pasado con la secretaria general del PSOE-A y presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, están superadas y ahora mismo están todos «remando en la misma dirección».

Así se pronunció Pedro Sánchez en el coloquio posterior a su conferencia ante el Foro Joly Andalucía, al que asistió Susana Díaz, con la que mantuvo un encuentro previo para analizar asuntos de interés para Andalucía y España.

Precisamente, Susana Díaz quiso dejar claro, en declaraciones a los periodistas antes de ese encuentro con Pedro Sánchez, que el líder del PSOE sabe que cuenta «con el apoyo y con la ayuda» de todos los socialistas andaluces y con la suya «la primera para todo lo que le haga falta, porque es evidente que este país necesita cuanto antes una alternativa y la alternativa tenemos que ser los socialistas para aplicar políticas de izquierda como estamos haciendo en Andalucía».

Ha ironizado al ser cuestionada sobre el deshielo de su relación. "El deshielo es para Frozen", ha dicho, al tiempo que ha insistido en que Pedro Sánchez tiene el apoyo de todos los socialistas andaluces "para lo que le haga falta".

En la misma dirección

En este mismo sentido, Pedro Sánchez indicó que Andalucía y, en particular, Susana Díaz cuentan con «todo el apoyo del PSOE y de su secretario general». «Tampoco hay mucho más y vamos a ayudar a Andalucía y a todas las reclamaciones que plantee su Gobierno y consideremos acertadas», dijo. «Ha habido discrepancias en el pasado, pero están superadas y ahora mismo estamos todos remando en la misma dirección», sentenció Sánchez.

El líder del PSOE anunció ayer, además, que su partido estará en contra de cualquier intento de «quebramiento» del Estado de Derecho y apoyará los recursos que presente el Gobierno ante el Tribunal Constitucional (TC) para «salvaguardar la legalidad en Cataluña».

Así, advirtió de que en «una Cataluña constitucional» no puede haber un presidente «inconstitucional», y dijo que se debe «pasar la página negra de Puigdemont». «El independentismo tiene mayoría parlamentaria pero no social y si logran formar gobierno tendrán que gobernar para el 100% de los catalanes y no solo para el 47% que votó opciones independentistas», incidió.