Todavía bajo el ´shock´ del positivo de Juan Dixon por nandrolona, conocido la tarde-noche del viernes, el Unicaja recibe esta mañana al Cajasol (12.30 horas/Canal Sur 2) en un derbi de máxima rivalidad en la pista y en el palco. Un choque esperado cada temporada de forma especial por los rectores de la Caja verde, pero que en esta ocasión llega a paso cambiado por la terrible actualidad de un club sumido esta campaña en un cúmulo de adversidades a cada cual más dolorosa.

Y es que después de lesiones, operaciones, derrotas inexplicables, fichajes temporales, pitos y pancartas, este nuevo ´caso Dixon´ enturbia todavía un poco más el día a día de un Unicaja al que todo le ha salido mal desde que Cabezas, Ndong y Haislip cogieron la puerta el pasado verano. Ya no se puede esconder más. Hay un gafe en el club o en su entorno más cercano. ¿Quién es? No lo sé, pero hay que encontrarlo. Por el bien de todos.

Hoy, de todas formas, no hay tiempo para las lamentaciones. Durante al menos 40 minutos habrá que olvidar este último revés porque el triunfo que hoy está en juego vale por dos si pensamos en el próximo ´play off´ por el título.

El Cajasol se presenta esta mañana en Málaga con tres victorias de ventaja sobre el club de Los Guindos en la clasificación de la ACB. Ellos son quintos y la única manera de echarles el guante es ganarles hoy, y si es posible por tres o más puntos, tras la derrota 63-61 en la primera vuelta.

La cruda actualidad ha restado protagonismo al que será el partido 900 de Aíto García Reneses en un banquillo de la Liga ACB. También al reencuentro del propio técnico cajista con Joan Plaza, el que fuera su ayudante en Badalona hace sólo un puñado de años. Maestro y discípulo cara a cara. Tiene mucho mérito lo del preparador catalán, que en su primer año en Sevilla ha sacado del anonimato al equipo hispalense, metido por derecho entre los ocho mejores de la ACB desde el inicio de la Liga, clasificado para la inminente Copa del Rey de Bilbao y en su mejor momento deportivo de la última década.

Se presenta un partido muy duro para los verdes. Moralmente hay que ver cómo afecta lo de Dixon, pero es que además este Cajasol llega a Málaga tras tres victorias seguidas (DKV, Lagun Aro y Estudiantes), como segunda mejor defensa del campeonato, con Tariq Kirksay como mejor ´ladrón´ de la Liga y con la novedad de Rubén Douglas, un escolta tirador (ex del Pamesa Valencia) que debutará en el Carpena tras la marcha de Maurice Ager.

Del lado verde la gran novedad es que el base-escolta francés Joseph Gomis se vestirá por primera vez esta temporada en la ACB. Ya se le vio de corto el miércoles en la Euroliga y esta mañana se estrenará en el banquillo verde supliendo la baja del propio Dixon. Augusto Lima también podrá jugar ocupando la ficha de Joel Freeland, baja por una tendinitis en el hombro. Lo dicho, que al Unicaja le crecen los enanos.

En plena crisis matrimonial entre la grada y el equipo, hoy se espera un gran ambiente en el Carpena. La visita de los de Sevilla siempre es especial. En este caso, además, llegarán acompañados por unos 200 fieles que darán colorido y rivalizarán con sus cánticos con una ´marea verde´ superada por los acontecimientos, pero tan necesaria como siempre para que el Unicaja cumpla con su objetivo. El equipo necesita a su gente y estoy seguro que la afición no le va a fallar. Me sorprendería lo contrario.