Motociclismo

Márquez: "¿Lo mejor de Qatar?, que ya no siento dolor"

El líder del equipo Repsol Honda considera que aún debe trabajar con su equipo la manera de obtener "esas dos decimitas que me faltan para pelear por la victoria"

Marc Márquez.

Marc Márquez.

Emilio Pérez de Rozas

Marc Márquez (Honda), ocho veces campeón del mundo de motociclismo, ganador de seis títulos mundiales de MotoGP desde que debutará en el 2013, rompiendo todos los récords de precocidad de los norteamericanos Freddie Spencer y Kenny Roberts, está de vuelta. El domingo, ni ganó, ni se subió al podio, pero hizo quinto, su mejor carrera en Lusail, Doha, Qatar, y sumó 11 puntos, más que ninguno de los “teóricos” candidatos al título de MotoGP, Fabio Quartararo (Yamaha, 9º, 7 puntos), ‘Pecco’ Bagnaia (Ducati, caída) y Joan Mir (Suzuki, 6º, 10).

Márquez asegura que consiguió el mejor resultado que podía dadas las circunstancias, su regreso, las condiciones de Qatar “que jamás me han ido bien”, la adaptación a la nueva Honda “aún no la controlo del todo y, sobre todo, no conozco sus límites” y, también, “me faltan esas dos decimitas que te dan la posibilidad de pelear por el podio e, incluso, por la victoria”. “Una cosa tengo clara, lo mejor de Qatar ha sido el fin de semana, los 11 puntos sumados y, sobre todo, que ya no siento dolor y empiezo a olvidar las lesiones que temí no me dejaran empezar el Mundial. La vista perfecta y el brazo derecho no me duele nada, nada. Así que empezamos a estar listos para pelear por el podio”.

Perder el Mundial

Márquez asegura que el objetivo “real” era el que consiguió al final de la carrera: puntuar lo máximo posible y no empezar perdiendo puntos, como le ha ocurrido a Bagnaia, que se cayó, o Quartararo, que acabó noveno. “Hace cuatro o cinco años, hubiese arriesgado. No sé, tal vez, pese a caerme en el ‘warm-up’ del domingo probando el neumático medio, tal vez lo hubiese montado en carrera. Ahora, no, ¡ni hablar!, en estas cuatro primeras carreras no se gana el Mundial, pero puedes empezar a perderlo”.

El campeón de Cervera (Lleida), ahora residente en Madrid por aquello de seguir recuperándose físicamente de su brazo derecho, esperaba una carrera más lenta y, por tanto, un gran premio en que la gestión del consumo de gasolina y el desgaste de las gomas jugase a favor de los pilotos más expertos. “Pero no fue así, resultó una carrera velocísima, por debajo del 1.54 minutos que yo esperaba ¡Pero si Enea rodó en 1.53, en la vuelta 17, un segundo más rápido que yo en ese giro! Y es evidente que, en este GP, yo no estaba para esa velocidad”.

Márquez cree que no tardará en hacer del todo suya la nueva Honda RC213V, que no está pensada, no, para su agresivo estilo de pilotaje. Cuando habla de esas dos decimitas que le faltan, no culpa a la Honda. “La moto tiene potencial, ahí está Pol (Espargaró) delante de todos, delante de mí. Soy yo, más que la moto, quien debe encontrar, en mi pilotaje y trabajando conjuntamente con los ingenieros, esas dos decimitas que me faltan. Las tenía en Mandalika, en el test, también en la ‘quali’ de Qatar, y, por tanto, debo recuperarlas ahora cuando volvamos a Indonesia en quince días”.

Para pelear por la victoria, por todas las victorias, Márquez cree que debes tener “una moto a gusto de tu pilotaje y, ahora, aún no la tengo, pero la tendré, claro. La nueva Honda tiene mucho potencial, de lo contrario no veríamos los entrenamientos y vueltas que estamos haciendo”.

Otros candidatos

Márquez, que además de Quartararo, Bagnaia y/o Mir, ve también como rivales en la pelea por el título a su compañero ‘Polyccio’, tercero en Lusail, y, por supuesto, al ganador de Qatar, a Enea Bastianini (“ahora, veo casi, casi, más peligroso a Enea que a Pol, pues la Ducati de Bastianini vuela, ¡vuela!”), asegura que todavía no se ve su estilo natural de pilotaje. “Aún no he lograrlo obtenerlo con esta moto, pero solo se trata de tiempo, de entrenamientos, de seguir dando vueltas y mejorar nuestro acoplamiento. Puede que salga con un chasis más rígido o con otro menos rígido. Solo es cuestión de paciencia. Lo importante es no descolgarte en el arranque del Mundial”.

“Repito, todo el mundo me conoce, debo encontrar el límite de esta moto y, cuando lo encuentre, ya podré hacer con ella lo que quiera”, insiste Márquez, que señala como uno de los problemas de la nueva Honda, muy elogiada por todos los pilotos oficiales de la firma alada, “el hecho de que al trasladar la tracción a la rueda trasera, pues ahí hemos mejorado mucho, el tren delantero queda un poco al aire, flotando, te ofrece menos confianza y todo el mundo sabe que yo piloto la moto apoyándome y fiándome del tren delantero. Pero, insisto, todo se andará y lograremos lo que buscamos”.

Suscríbete para seguir leyendo