Tenis

Davidovich desperdicia dos puntos de partido y pierde ante Rune

El tenista malagueño pudo sentenciar el encuentro antes de llegar al super tie-break, pero un muy mal saque en el desempate final le costó el pase a octavos en Wimbledon al caer por 6-3, 4-6, 3-6, 6-4 y 7-6 (8)

Alejandro Davidovich perdió en Wimbledon ante Rune.

Alejandro Davidovich perdió en Wimbledon ante Rune. / Reuters

EFE/L. O.

El malagueño Alejandro Davidovich cayó este sábado ante el danés Holger Rune, por 6-3, 4-6, 3-6, 6-4 y 7-6 (8), y se quedó a las puertas de sus primeros octavos de final en Wimbledon, una vez superado el techo de la segunda ronda en el torneo londinense.

Davidovich, que ya alcanzó la segunda semana en Roland Garros hace dos años, desperdició dos puntos de partido en el décimo juego del quinto set y una ventaja de 8-5 en el superdesempate antes de caer ante el danés en un choque que se vio nuevamente interrumpido por la lluvia.

Lo cierto es que comenzó Rune dominando el partido, mucho más seguro sobre la pista y con más confianza en su juego. Sin embargo, el malagueño se fue creciendo sobre la hierba para remontar el encuentro y situarse con un 2-1 en mangas a su favor. A partir de ahí, buscar el tercero era fundamental para cerrar el duelo ante el danés.

Sin embargo, pequeños detalles volvieron a decantar la cuarta manga hacia el rival para empatar de nuevo el encuentro. Todo o nada. Con un pase a los octavos de final de Wimbledon en juego, cada uno se llevó su saque. Es más, Davidovich tuvo varios puntos a su favor para rematar un 6-5, pero los nervios acabaron pudiendo con él y la condena le llevó a un super tie-break. 

El malagueño, en un partido que fue una auténtica montaña rusa en el que tuvo tanto brillantes momentos como algunos malos, hizo la locura de un saque de cuchara con 8-8 en el superdesempate final, lo que permitió a Rune hacerle un 'passing' con sencillez y quedarse con el partido a placer con su servicio que finalmente sentenció a su favor.

El danés, que disputará sus primeros octavos de final en Wimbledon, estalló de alegría y ganó uno de los mejores partidos de este año en el All England Club.