"Sí, escuché los pitos"

Sergi Roberto, tras tumbar al Almería: "Es la primera vez que marco dos goles"

Tras el 1-0 llegó hasta una tímida ola para recorrer las gradas del estadio que vivió su peor entrada de la temporada, con 34.471 espectadores

Sergi Roberto celebra uno de sus dos goles al Almería en Montjuïc.

Sergi Roberto celebra uno de sus dos goles al Almería en Montjuïc. / EFE

Marcos López

La noche que nunca había vivido. "Es la primera vez que marco dos goles", reconoció Sergi Roberto, la estrella de un Barça que sufre cada partido como si fuera una tortura. Incluso ante el colista, al que abatió en el último suspiro (3-2). "Había que sacar los puntos como fuera", argumentó el capitán, quien retrata los profundos desequilibrios que angustian al equipo de Xavi. "Entiendo los pitos, pero también he escuchado aplausos y el apoyo del público. Puedo entender que la gente no esté contenta. Ahora, hay que estar más unidos que nunca”, contó Sergi Roberto, que ejerció de salvador.

Tuvo que aparecer, de nuevo, Sergi Roberto con un derechazo delicado para devolverle la tranquilidad al equipo tal si fuera Xavi con Van Gaal (20 diciembre 1988) en Valladolid. Marcó de cabeza el 2-1 y con la derecha el 3-2, estrellando, además, un zurdazo en el larguero del Almería. Volvió a ser interior. Interior con llegada. Nada de lateral reciclado. Ni de otro rol donde no puede expresarse con la autoridad que se le suponía. Y en medio de la angustia emergió la figura del capitán para sobreponerse a tanta y tanta tensión.

Pitos y enfado en Montjuïc

Hubo pitos. A la media hora, y en un desértico Montjuïc, el público se cansó. Expresó su enfado por el mal juego del Barça de Xavi, un equipo que se ha derrumbado perdiendo todas las señas de identidad que le hicieron campeón. Luego, llegó el gol de Raphinha y el aficionado, sumergido en ese clima de inestabilidad que sacude al club. Y, por supuesto, a los jugadores. Y, obviamente, al entrenador.

Baptistao se adelanta a Araujo para batir a Iñaki Peña en el 1-1 del Almería en Montjuïc.

Baptistao se adelanta a Araujo para batir a Iñaki Peña en el 1-1 del Almería en Montjuïc. / EFE

Tras el 1-0 llegó hasta una tímida ola para recorrer las gradas del estadio que vivió su peor entrada de la temporada, con 34.471 espectadores. Pero todo se envenenó cuando el VAR dictaminó que el gol de Baptistao elevó el 1-1 al marcador electrónico de Montjuïc, prólogo de otra tormenta de pitos. 

Xavi se puso serio. Tanto que quitó a João Félix y Christensen en el descanso. Sacó a Ferran Torres y Koundé. Pero la reacción llegó con otra acción a balón parado. Dos saques de esquina, dos goles (Araujo remató, Raphinha aprovechó el rechace en el 1-0 y Sergi Roberto cabeceó luego con elegancia en el 2-1).

El Barça encajó 20 goles en las 38 jornadas de la Liga que conquistó. Ahora, suma 21 tantos en contra en 18

Aunque no hay tarde ni noche tranquila para el Barça, un equipo con poco remate y manos de mantequilla como demostró Iñaki Peña en el 2-2 cuando voló por encima del cuerpo de Araujo con tan mala fortuna que se le escurrió la pelota para abrir la puerta del empate. Y se estaba masticando el drama porque el Barça estaba desnudo. En la temporada pasada, encajó 20 goles en 38 jornadas; en ésta lleva 21 en 18.

Pero apareció el interior Sergi Roberto, lleno de sangre culé, para proporcionarle un poco de calma a un equipo angustiado.