Trucos para dormir mejor: Que las altas temperaturas no te mantengan sin pegar ojo

Elegir bien la ropa de cama, mojar el suelo o apagar los aparatos electrónicos son algunos de los consejos para refrescar el dormitorio que te ayudarán a descansar toda la noche

Carmen Romero

Con la primera ola de calor asolando la península y el mercurio subiendo progresivamente durante este fin de semana de agosto es necesario recolectar algunos consejos para que la hora de dormir no se convierta en una pesadilla sudorífica. Las vueltas en la cama, los paseos a la cocina en busca de agua que parece no ser suficiente y la sensación de levantarse aún más cansado de lo que uno se acostó son indicativos de que es necesario tomar cartas en el asunto. 

“El entorno térmico es uno de los factores más importantes que pueden afectar el sueño", esa fue una de las conclusiones de la investigación llevada a cabo por el Centro de Investigación de la Universidad Tohoku Fukushi en Japón que refleja como una temperatura inadecuada acaba perturbando el descanso. Por ello, te damos varios consejos para mantener unas condiciones idóneas en la habitación sin recurrir al encarecido aire acondicionado y lograr un correcto descanso.

1.Acondicionar el dormitorio

Es de vital importancia que el espacio en el que se vaya a descansar sea cómodo y confortable. Para lograr alcanzar una temperatura adecuada para dormir se puede recurrir a bajar las persianas durante las horas centrales del día y ventilar el cuarto cuando atardezca o por la noche, que generalmente hace algo más de fresco. Otra opción válida y mucho más económica que el aire acondicionado, sobre todo ahora que la factura de la luz se ha encarecido considerablemente,  es emplear un ventilador combinándolo  con un barreño de agua y hielos colocado delante para que la brisa que proporcione sea fresca. Si es posible se debe optar por una habitación en la planta baja de la casa puesto que el calor tiende a acumularse en las plantas superiores.

2. Elige bien la ropa de cama

Las sábanas compuestas por fibras naturales, como el algodón, absorben mejor el sudor que las sintéticas puesto que son más transpirables y favorecen la circulación del aire. Otro material que se recomienda para la ropa de cama es el lino mientras que las de poliéster deben evitarse. Es preferible optar por sábanas de todos claros o blancas. 

Con respecto a la ropa para irse a dormir, es importante apostar por materiales ligeros como el algodón, el satén o la seda y combinarlos con diseños holgados puesto que un pijama ceñido provocará más calor. Un truco a la hora de escoger camisones sería escogerlos con tirantes, obertura lateral o de corte midi.

3.Moja el suelo

Aunque lo que menos pueda apetecer a la hora de dormir es coger una fregona, pasarle este utensilio doméstico al suelo del dormitorio con un cuba de agua helada puede lograr refrescar el ambiente bajando levemente la temperatura de la estancia. 

4.Apaga los aparatos electrónicos

Los móviles, ordenadores, televisores o tablets que se mantengan conectados a la corriente eléctrica son una fuente de calor incluso aunque no se estén utilizando por lo tanto es aconsejable apagarlos y desenchufarlos. 

Los hábitos de uso tecnológico acaban influyendo en la capacidad de poseer un sueño reparador llegando a producir insomnio y cansancio al levantarse por lo que es recomendable dejar el móvil una hora o dos antes de irse a la cama. 

5. Date una ducha

Una buena ducha ‘hace milagros’ ayudando a rebajar la temperatura corporal y se puede realizar esta práctica como rutina antes de irse a la cama. Desde la web del medicamento Dormidina, empleado para el insomnio ocasional, han recomendado que la ducha no sea  con agua completamente fría ya que  puede llegar a ser contraproducente por lo que se sugiere un baño templado.