Pretemporada

Sin victoria, pero con la afición (0-1)

En la vuelta al público a las gradas en La Rosaleda, el Málaga CF no pudo reponerse al gol de Elady en la primera parte

Mar Bianchi

Mar Bianchi

Cómo va a ser lo mismo escuchar el crujir de un poste cuando el balón lo golpe y los cánticos de la afición que ver un partido a través de una pantalla, con sonido ambiente grabado y las gradas digitalizadas para simular que hay gente entre fila y fila. El ambiente de La Rosaleda en la noche de este sábado, para ver el encuentro entre el Málaga CF y el Tenerife, no se podía asemejar a cómo lucía aquel 8 de marzo de 2020, cuando los de Pellicer jugaron contra el Zaragoza y todos vivíamos ajenos a lo que sucedería unos días después. Pero menos da una piedra y estos son los primeros síntomas de que, muy poco a poco, estamos saliendo de esta pesadilla llamada coronavirus.

Apenas 24 horas después de caer en el Nuevos Los Cármenes ante el Granada CF, los de José Alberto volvieron a vestir la elástica blanquiazul. Para este primer partido con algo de público en las gradas y el último de la pretemporada blanquiazul, el Málaga CF presentó una alineación bastante parecida a la que el míster asturiano podrá sacar el ante el Mirandés en el estreno liguero de dentro de unos días. Destacó, sobre todo, el debut del central galo Peybernes, última incorporación al plantel en esta ventana estival de fichajes.

Faltaron unos detalles para que tanto boquerones como insulares mostraran un once de gala, los de Ramis arrastraban hasta siete bajas entre lesionados y recién incorporados, mientras que el Málaga CF tenía en la enfermería a Isma Casas, tuvo que ser sustituido en el encuentro ante el Granada CF y sufre un esguince en su tobillo derecho, además de Escassi y Benkhemassa, tocados.

Por otra parte, el partido sirvió de reencuentro con Juan Soriano, portero en el conjunto costasoleño la pasada temporada que ha acabado en el equipo chicharrero de Luis Miguel Ramis.

A pocos días del arranque oficial de LaLiga SmartBank, el choque se convirtió en el mejor test para ambos clubes. Los de José Alberto, en casa, motivados con el calor de su gente, comenzaron presionando, cómodos con el balón en los pies . Con pocos minutos en el contador, el canterano Haitam protagonizó una contra peligrosa que frenó Mellot. Los blanquiazules intentaban ser verticales y empezar a crear peligro, pero la defensa tinerfeña había hecho los deberes y tenían muy tapados a los jugadores peligrosos malacitanos como Jozabed. Era misión imposible que el de Mairena, sin espacios, sacase algún balón peligroso. 

Hubo poco fútbol en la primera media hora de juego, pero eran los de Ramis los más activos en ataque. Dani Barrio tuvo que despejar alguna que otra acción peligrosa de los chicharreros, rocosos y en la mayoría de ocasiones bien colocados en el tapete de La Rosaleda. 

En su estreno, Peybernes se durmió en defensa con la peor de las consecuencias: gol de Elady para los visitantes. La jugada comenzó por la izquierda y a la espalda de la defensa. Pero si su error costó un gol en el minuto 35, escasos minutos antes del descanso logró salvar una jugada que olía a 0-2. Otra vez los de José Alberto sufriendo a balón parado, tuvo que salir corriendo el defensa francés a sacar el balón casi desde dentro.  

Así, con la sensación de peligro encima, incómodos sin balón y cediendo espacios acabó la primera mitad para los blanquiazules.

Uno de los primeros movimientos en el banquillo de José Alberto fue la entrada de Paulino de la Fuente para dar descanso al joven Haitam. Con él en el terreno de juego, Jozabed fue quitándose de encima a jugadores rivales y también con Jairo pudieron ser más ofensivos. Jairo desequilibraba, Paulino ganaba metros y el Málaga CF mostró mucho más en los 20 minutos iniciales de la segunda mitad que en toda la primera parte. 

Seguían bien plantado el Tenerife, pero bajó varias revoluciones. Los boquerones lo aprovecharon para seguir buscando el empate. En el 73 tuvo que salir Soriano al rescate de los insulares tras un gran disparo de Luis Muñoz, un balón mordido a raíz de una acción entre Jozabed y Brandon. Poco después, Paulino y Larrubia continuaron en la presión para que Loren rozase el poste derecho del cancerbero sevillano

El tiempo corría en contra, Málaga tenía la posesión y las ganas pero se topaba con la buena concentración defensiva del Tenerife. En la vuelta al templo blanquiazul no se pudo celebrar una victoria, pero estar allí año y medio después ya lo era. La próxima cita, de gala, el lunes 16.