Málaga CF: Un proyecto de ascenso en dos años

La palabra ascenso ha pasado a dar vértigo en el Málaga CF. Después de la infame experiencia vivida durante la pasada temporada en la que se afirmó por activa y por pasiva que el objetivo era luchar por subir a Primera División, nadie quiere pronunciar ese término. Ni siquiera Kike Pérez o Loren Juarros, que han llegado al club de Martiricos en los últimos meses. El tabú es igual para todos, pero, aunque no se exprese de forma explícita, la meta que tiene el equipo ahora en Primera RFEF es abandonar el fútbol profesional cuanto antes y parece que ese fin está fijado a la temporada 24/25... como máximo.

Es indudable pensar que el Málaga CF va a ser uno de los grandes equipos de la categoría -a falta de definir el próximo 27 de junio cómo será la separación de los dos grupos-. No será el mayor presupuesto, porque si de algo carece Primera Federación es de control económico, pero sí que va a tener un equipo potente para regresar a un estatus del que nunca debió salir. 

La estrategia que se puede ver en el nuevo Málaga CF de Kike Pérez y Loren está siendo muy clara. Los dirigentes blanquiazules están firmando a los nuevos jugadores con un contrato de mínimo dos años. Esa, por ejemplo, es la duración de la relación contractual con Dioni Villalba, futbolista de 33 años que, en caso de ascender en 2024 o 2025, se iría hasta los 34-35 años. Por lo que su contrato no está tanto supeditado al ascenso, sino más bien a la edad del nuevo delantero malagueño.

Los que sí cuentan con una cláusula de ascenso son Alfonso Herrero y Jokin Gabilondo -este lunes será jugador blanquiazul-. Ambos futbolistas han firmado o van a firmar por tres temporadas en formato de 2+1. Es decir, tienen dos cursos asegurados en Martiricos ampliables a un tercero siempre y cuando La Rosaleda vuelva a albergar, como muy tarde, en 2025 partidos de fútbol profesionales. 

Otro caso distinto es el de Juanpe Jiménez. El Málaga CF cerró un acuerdo esta misma semana con el centrocampista gaditano por tres cursos, siendo ampliables a dos más que podrían irse hasta la campaña 27/28 -en función de diversos objetivos como puede ser el ascenso-. 

Contratos largos en Primera RFEF

Lo cierto es que puede ser extraño que el Málaga CF esté ofreciendo contratos de larga duración estando en el fútbol no profesional. El club, cuando ni de lejos atraviesa su mejor momento económico, se estaría atando a relaciones contractuales de dos años sin saber ni lo que ocurrirá el próximo verano ni tampoco lo que podría suponer un nuevo curso en Primera RFEF. 

Sin embargo, la apuesta del conjunto blanquiazul es la estabilidad -que no pueden ofrecer todos los rivales- en una división tan complicada económicamente. El mejor ejemplo es el nuevo guardameta. Alfonso Herrero jugará en La Rosaleda por el ‘simple’ hecho de que aquí le han ofrecido dos temporadas como mínimo. 

Lo que es seguro es que todo el mundo ha aprendido, nadie se atreve a mencionar el término. Trabajo, trabajo y más trabajo desde que arranque la pretemporada con Sergio Pellicer al mando. Serán rivales nuevos, estadios nuevos por visitar y un fútbol muy diferente en el que todo mundo estará esperando y deseando también ganar al Málaga CF. Así que en cuanto a nombre sí, será uno de los punteros, pero si alguien debe haber aprendido que de nombre no se vive es, precisamente, la entidad de Martiricos.

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