Los socialistas criticaron ayer en rueda de prensa las continuas modificaciones presupuestarias que realizan el PP y OSP y avisaron de que pondrán en conocimiento de los órganos judiciales pertinentes la falta de información y transparencia, ya que, según aseguran, ellos ofrecían trimestralmente información a la oposición sobre esta cuestión.

El portavoz del PSOE, José Benal, aseguró que la negociación con la Junta de Andalucía de las condiciones de devolución del anticipo reintegrable han permitido que el Ayuntamiento ahorre este año más de un millón de euros, en concreto 1.018.000 euros. Sin embargo, el equipo de gobierno en vez de destinarlo a políticas sociales o las obras paralizadas en Miraflores, Santa Marta, Plaza de Toros, Nueva Andalucía o Fuente Nueva en San Pedro, «va a hacer un trasvase de dinero a personal porque previamente el dinero de personal se ha cogido para otras delegaciones que no tenían partida presupuestaria».

Asimismo, Bernal afirmó que, si a estas alturas, el municipio se mantiene todavía en pie es porque su gobierno dejó cien millones de euros en el banco, la deuda pagada y 32 millones de euros en remanente; un remanente que seguiría sin destinarse a obras y reformas integrales de los barrios.

La gestión de los presupuestos que llevan a cabo el PP y OSP es, a su juicio, «nefasta, caótica y está cargada de despilfarro», lo que provocaría que el próximo gobierno tenga que volver a encontrar la estabilidad.

Uno de los ejemplos de mala gestión que ha proporcionado la oposición es el cierre por reformas del gimnasio municipal Rafael Vera ,el cual califican como «una excusa para poder ahorrar dinero por alguna parte». Además, el PSOE considera que la remodelación del centro deportivo ya se realizó cuando los socialistas lideraban el ejecutivo marbellí.

Por su parte, la delegada de Ordenación del Territorio y Vivienda, María Francisca Caracuel, expuso que lo complicado no es aprobar unos presupuestos, sino ejecutarlos. Ahí es dónde, según dijo, se ve la capacidad gestora de cada equipo de gobierno y, la del anterior mandato, a su juicio, fue mínima. «No eran capaces de gastar el dinero que tenía Marbella en sus presupuestos; había dinero que no gastaban y además se pagaba tarde a los proveedores», afirmó Caracuel.

Por otro lado, OSP defendió en el balance del año de gobierno que los presupuestos del 2019 serán participativos. También argumentó que las iniciativas que se han estado poniendo en marcha hasta ahora han sido imprescindibles, tomadas con criterio y acordes a las necesidades del municipio.