Las atenciones que prestan los voluntarios de Cruz Roja en el Centro de Inclusión para Personas sin Hogar están desbordando las previsiones con las que se abrieron las instalaciones.

El Centro de Inclusión, habilitado en unas antiguas dependencias de la Policía Nacional, entró en funcionamiento en febrero para atender a parte de las cerca de 40 personas que carecían de hogar en el municipio, según un estudio que elaboró un colaborador en prácticas.

Sin embargo, los voluntarios de la Cruz Roja realizan unas 35 asistencias al día, cifra que subió hasta las 45 en las jornadas de verano. «El verano es una época en la que hay una mayor movilidad geográfica. Igual que hay personas que vienen a Marbella de vacaciones también las hay que vienen a encontrar trabajo y carecen de vivienda», señala el director del centro, Jacobo Wahnich.

El director, que presta el servicio de psicología en el centro y atiende a los transeúntes junto a otros seis voluntarios de la Cruz Roja, destaca que el objetivo del centro es romper la dinámica en la que se encuentran los sin techo y ayudarles a reintegrarse en la sociedad.

El centro, cuya rehabilitación rondó los 62.000 euros, funciona de 09.00 a 21.00 horas, desde que entró en servicio. El grupo municipal socialista anunció ayer que pedirá en el pleno de noviembre al equipo de gobierno que amplíe el convenio con Cruz Roja con una ayuda de carácter extraordinario para que el centro atienda a los transeúntes también por las noches los meses de invierno y en las épocas de lluvia.

«En los últimos meses ha aumentado el número de personas sin hogar debido a las circunstancias económicas. El aumento ha sido importante. La asistencia que hace Cruz Roja, encomiable, pero se queda corta y se necesita aún más. Hay que ampliar el servicio», señaló el concejal socialista José Bernal, que aseguró remitirse a datos que le han facilitado diversos colectivos sociales.

El centro cuenta con una sala de estar, salas multifuncionales y despachos. El anterior equipo de gobierno, formado por PSOE, IU y OSP, invirtió 18.000 euros para adquirir diferente mobiliario, como dos mesas para terapia ocupacional, doce sillones reclinables y lavables, 24 sillas para los espacios, tres mesas de despacho, un armario ropero, dos cafeteras eléctricas, dos frigoríficos, dos microondas y dos televisores de 50 pulgadas.

El centro, que tiene previsto celebrar el viernes una jornada de puertas abiertas para mostrar la labor que desempeña, presta servicios de desayuno y aseo y atención social con entrevistas, talleres o itinerarios formativos para facilitar la inserción laboral.