El Ayuntamiento de Torremolinos cerrará el actual vertedero municipal, en cumplimiento del auto dictado en agosto pasado por el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 1 de Málaga, que ordena la clausura de dicho basurero como medida cautelar, a la espera de la definitiva resolución judicial. La consecuencia inmediata de esta decisión será la subida de la tasa de basura a partir del 1 de enero de 2011.

Según el primer teniente de alcalde de Torremolinos y portavoz del grupo municipal del Partido Popular, Ramón del Cid, «los residuos sólidos de la localidad serán transportados, a partir de ahora, al vertedero más adecuado, que probablemente sea el de Casares, con el consiguiente encarecimiento del servicio». Cada año se recogen en Torremolinos unas 46.000 toneladas de basura, por lo que el aumento del coste del servicio ascenderá a 39 euros más por tonelada, lo que equivale a 1,8 millones de euros aproximadamente.

Sin embargo, «el Ayuntamiento no cargará el total de ese incremento en los recibos de los vecinos, sino una parte», apuntó Del Cid, «mientras que las arcas municipales se verán mermadas en unos 600.000 euros al año».

Los mayores afectados por el incremento del importe de los recibos de basura, cuyas tarifas se aprobarán hoy en pleno, serán los ciudadanos. No obstante, la subida será proporcional al consumo de cada vecino.

Persecución socialista

Según el portavoz popular en el Ayuntamiento de Torremolinos, este aumento, que afectará de forma negativa al bolsillo de los torremolinenses, es consecuencia de la «persecución socialista» contra el gobierno municipal del Partido Popular de Torremolinos.

Y es que fue el PSOE el que abrió el vertedero. Del Cid explicó que «la comisión gestora presidida por el PSOE firmó un convenio el 5 de marzo de 1990 con la empresa FCC por la que establecía la ubicación del vertedero en el lugar que ocupa hoy». Durante los años de mandato socialista no existió discusión alguna sobre el basurero, pero nada más empezar a gobernar el PP en 1996, comenzó la persecución política del PSOE con el argumento del vertedero» criticó el edil.

De hecho, en 2004 el PP remitió un escrito a la Consejería de Medio Ambiente en el que informaba de que el vertedero cumplía la legislación vigente en España y en Europa. Sin embargo, al año siguiente, la Consejería de Medio Ambiente abrió un expediente sancionador al Ayuntamiento de Torremolinos, imponiéndole una multa y requiriendo la limpieza de la zona, «aunque sin declarar expresamente la clausura del vertedero», según Del Cid. Asimismo, presentó una denuncia penal contra el Consistorio torremolinense, que fue archivada.

En 2006, la Junta abrió un segundo expediente sancionador, imponiendo otra multa, medidas correctoras y la restitución ambiental, pero el Ayuntamiento opuso el correspondiente recurso. En consecuencia, la Junta de Andalucía rectificaba y requería expresamente el cierre inmediato del vertedero por encontrarse sin legalizar. «El PSOE ya ha conseguido lo que quería: cerrar el vertedero y culpar al PP de incrementar los impuestos a los vecinos», concluyó Del Cid.