Lucio Fontana, nacido en 1899, fue autor de una de las obras más radicales de la segunda mitad del siglo XX. Firmante de varios manifiestos, inauguró en 1947 una nueva vía basada en su concepción muy personal del espacio.

A partir de 1949, Fontana dio a todas sus obras el título general de Concetto spaziale [Concepto Espacial]. Las perforaciones (Buchi), desde 1949, y los cortes (Tagli), desde 1958 se convierten en su marca y su éxito contribuye a borrar al primer Fontana: un escultor hábil que, en los años 1920 y más tarde ocasionalmente, se mostró capaz de satisfacer los encargos oficiales. La colección del Centre Pompidou solamente puede atestiguar de esta línea académica a través del diálogo que Fontana mantuvo con sus colegas italianos y sudamericanos durante sus años de formación. Nació en Argentina, país que abandonó para irse a Italia, pero al que regresó durante dos largas y decisivas estancias. La exposición también presenta dibujos, incluido un autorretrato de 1940, preámbulos a intervenciones arquitectónicas y otros ambientes por recorrer, creados a partir de 1948.

Las obras del maestro están junto a las del precursor futurista Giacomo Balla, las de sus primeros amigos, las de sus grandes contemporáneos y las de los artistas más jóvenes que le estimularon, como Yves Klein y Piero Manzoni, sin olvidar a los que más tarde se cruzaron con Fontana, mentor y coleccionista. La exposición recoge de esta forma la obra inicial, central y tardía del autor.