La casa y el periódico de Cánovas

Se cumple hoy 8 de febrero un nuevo aniversario del nacimiento de Cánovas. Han transcurrido 194 años ya, y nos vamos acercando al segundo centenario, cuya celebración habrá que ir preparando. Volvemos al ilustre malagueño como cada año, para romper el olvido. Y digo con Gloria Fuertes, que “lo mejor del olvido es el recuerdo”, en contraposición con nuestro Manuel Alcántara que lloró, aún siendo joven, “que lo mejor del recuerdo es el olvido”. Dos palabras , recuerdo-olvido, ligadas por el mismo sentimiento, (aunque en distinta posición y función gramatical). Hoy, insistimos, es obligado recordar al Hijo Predilecto que tanto hizo por su ciudad para no caer en su olvido. Aunque señales evidentes hay de que la ciudad lo tiene muy olvidado. Ahí están las ruinas de su casa natal en la calle Nuño Gómez. Hacemos nuestras las palabras que escribiera el historiador Carlos Seco Serrano en su libro “De los años de Cánovas”: “Me causó verdadera desolación, no hace muchos días, ver en Málaga lo que queda de su casa natal de los muros que presenciaron las inquietudes de niño y adolescente….”- Y a renglón seguido, con un lenguaje desnudo de bilis, con palabras directas y claras, hace un reproche que golpea sin herir, pero que duele en lo más hondo. “ Que Málaga haya desaprovechado esta ocasión del centenario para rehabilitar el lugar natal de quien ha sido , junto con Picasso, uno de sus hijos más ilustres de los últimos siglos, habla muy poco a favor de la encantadora ciudad andaluza“. De eso hace ya más de dieciséis años. Mas, ahí sigue en la calle Nuño Gómez, entre el rio Guadalmedina y la calle Carretería, el esperpento ciudadano, gratuitamente visitable. Podría servir para localización de una escena en un cortometraje que perpetuaría la imagen de un desastre bélico. Cierto que ha habido muestras de cierto interés municipal: La adquisición de las casas colaterales, el proyecto de Casa-Museo de los llorados Francisco Peñalosa y César Olano, y más recientemente el Centro Cultural encargado al estudio granadino Fresneda&Zamora . ¿ Podría ser que este año, al fin, haya solución al conflicto y terminen los lentos procesos burocráticos?

Nos unimos a las voces de los ilustres académicos de San Telmo – José Manuel Cabra de Luna, Rosario Camacho, Manuel Olmedo, etc - reivindicando la rehabilitación de la casa de Cánovas. Y nos ponemos en la primera línea reivindicativa por muchas razones. Entre ellas, una , para nosotros especial. Cánovas creó un periódico cuando tenía 17 años. Historiadores y biógrafos cuentan que “La Joven Málaga” fue creado por él, pero que “no se encuentra rastro alguno”. “Publicación fantasmal”, dijeron. Hasta que la fortuna puso en nuestras manos la colección completa de los 14 números editados. A nuestro juicio es una joya periodística. Forma parte del patrimonio histórico cultural, no solo de la ciudad que lo vio nacer, sino también de todo el extenso y rico patrimonio del periodismo español. Es un bien de interés cultural. Hay que poner en valor este documento único que contiene los primeros escritos del insigne personaje, exclusivamente recogidos en esta publicación, después de estar desaparecida más de 175 años.

Este año se conmemora el 125 aniversario del asesinato de Cánovas y con tal motivo el Instituto de Estudios Históricos del CEU de Madrid celebrará un Congreso Internacional en su honor , para profundizar en el estudio de las monarquías liberales europeas del XIX. ¿ Y aquí en Málaga, qué?. El Instituto Municipal de la Vivienda, donde parece dormir el expediente del Centro Cultural Cánovas , podría agilizar los trámites administrativos y resolver el conflicto con la Junta de Andalucía para que se pueda poner en marcha y así se cumpliera el milagro, diciendo “levántate y anda”. Por nuestra parte, seguimos con el compromiso de difundir el pensamiento y los escritos de Cánovas. Nos estamos esforzando en la edición facsímil de “La Joven Málaga”, donde Cánovas escribió: “Solo es nuestro objeto hacer de este periódico un centro común de todo el saber y de todos los adelantos de la juventud Malagueña…”. Para que cualquier ciudadano pueda leerlo en la Biblioteca Nacional, en nuestro Archivo Municipal o en la biblioteca de su barrio.