El Unicaja y Jaime Fernández tratan de desatascar el pago de la cláusula de rescisión del jugador del Morabanc Andorra, cifrada en 250.000 euros, para poder culminar las negociaciones emprendidas hace unos días. El Unicaja quiere fichar al base madrileño, que también puede actuar como escolta, para las tres próximas temporadas, y hay contactos muy avanzados entre las dos partes.

El Unicaja y la agencia del jugador «BDA», representada en España por el exjugador Quique Villalobos, están ahora haciendo números para abonar la cláusula de salida de Jaime, que está tasada en 250.000 euros. El club ve esta opción factible, pero compartiendo gastos, y aquí no hay buena sintonía. El Unicaja está dispuesto a pagar parte de esa cifra, aunque urge solucionar este tema. Fernández puede activar esta cláusula con una fecha tope: 14 de julio. A partir de ahí, ya no podría abandonar el Morabanc Andorra, club al que llegó la pasada temporada.

Su desembarco en el conjunto del Principado fue, además, muy complicado, ya que el Estudiantes, club en el que se formó, igualó la oferta presentada en tanteo por Andorra. Los dos clubes tuvieron que negociar y el «Estu» recibió una indemnización de 100.000 euros. Y, en una hipotética venta del jugador, también recibiría un porcentaje.

El «combo» se ha marchado de vacaciones y el Unicaja trata ahora de encontrar el mejor camino para cerrar un acuerdo que está ya muy avanzado, tal y como se informó ayer en La Opinión, y abonar su cláusula de escape. Las dos partes están por la labor de solucionarlo. El Unicaja contaría así con un valiosísimo cupo de sólo 25 años, con experiencia en ACB y Eurocup, con un futuro muy prometedor y la opción de poder compaginar el puesto de base y escolta, como ha hecho con la selección española.