Los veranos en Málaga no pueden ser otra cosa que calurosos. A la obviedad le siguen los matices que prevén una temporada más cálida de lo normal. «La misma tendencia que en los últimos años», según el director de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) de Málaga, José María Sánchez. Su previsión es calcada a la que en términos generales espera Aemet a nivel nacional para un verano que empezará oficialmente hoy a las 19.16 horas.

La buena noticia para Málaga es que los pronósticos hablan de medio grado menos de promedio respecto a las medias de los últimos años, frente a los 1 y 2 grados de más que se alcanzaron el año pasado. La mala noticia, que habrá más terral que durante el año pasado. Según Sánchez, esta previsión se basa fundamentalmente en la inusual poca presencia que este viento tuvo el verano pasado en favor de un levante que se asoció a una elevada humedad. Aún así, Sánchez confió en que el terral no se cebará con los malagueños, aunque predijo la próxima presencia de este viento para la noche del próximo jueves, en plena velada de San Juan. Hablando de tradiciones, agosto se presume como el rey del terral, ya que su promedio histórico se sitúa en los 3,5 días cuando el termómetro supera los 35 grados, frente a los 2,7 de julio y los 1,2 de junio. Agosto también lidera el promedio cuando el terral provoca temperaturas superiores a los 37 grados (1 frente a 0,8 y 0,2). En los días extremos, cuando el termómetro pasa de los 39 grados, el promedio se iguala entre julio y agosto.

Con terral o sin él, la predicción estacional para este verano presentada ayer en Madrid anuncia fuego para principios de la semana que viene, ya que se espera una ola de calor que tendrá una mayor presencia en el oeste y en el sur de la península, que provocarán valores de hasta 40 grados en zonas de Andalucía con una alta sensación térmica de bochorno.

Balance primaveral

Durante la presentación de las previsiones veraniegas, Aemet también habló de las conclusiones primaverales. El jefe de predicción de la Agencia Estatal de Meteorología, Fermín Elizaga, señaló que durante la estación que concluye hoy se ha alcanzado una temperatura promedio de 15,30 grados centígrados, es decir, 2,3 grados por encima del valor medio normal en relación con el periodo de referencia (1971-2000), por delante de los años 1997 (15,24 grados centígrados) y de 2006 (15,13 grados centígrados). Se trata pues del trimestre marzo-mayo más cálido de la serie histórica iniciada en 1951.

El portavoz de la agencia añadió que las anomalías positivas han llegado a superar los 3 grados centígrados en algunos puntos del suroeste de Galicia, País Vasco y un área del Sistema Central. En general, dijo Elizaga, todas las regiones superaron las temperaturas medias para esta estación, y tan solo en la franja mediterránea comprendida en el sur de Cataluña y el litoral mediterráneo andaluz, así como en Canarias, partes de Baleares y la provincia de Huelva, las temperaturas fueron superiores en menos de 2 grados centígrados, mientras que en el resto, las anomalías positivas oscilaron entre los 2 y 3 grados centígrados.

En Baleares la primavera fue muy cálida a extremadamente cálida, al tiempo que en Canarias, este trimestre resultó muy cálido en general, con una anomalía superior en torno a 1 grado centígrado, menor que el resto del país. En cuanto a las temperaturas más bajas, el episodio más significativo del trimestre se produjo en la primera decena de marzo, cuando se registraron heladas en todo el interior, con valores por debajo de los -5 grados.